Trastienda All Star 2019: la fiesta más íntima
09:15 18/02/2019 | La NBA volvió a sus orígenes más humildes en un mercado pequeño y tradicional como es North Carolina, lleno de recuerdos y mitos ligados a la historia del baloncesto, para acoger un All Star en familia, lejos de la fanfarria.
Sin grandes grandes shows en las presentaciones ni hologramas en 3D sobre la cancha como los que se vieron en años anteriores, sin estridencias (exceptuando los modelos de zapatillas exclusivos para la ocasión) y sin grandes estrellas triunfadoras entre los protagonistas de los concursos del sábado ni tampoco en el partido de jóvenes ‘World vs USA’. La cita de las estrellas 2019 recuerda que por una a ciudad humilde, acogedora, se ha de pasar elegan-temente de puntillas. De fiesta, sí, pero sin desfase.
¿Y estos quienes son?
Se esperaban grandes titulares para ese terremoto europeo llamado Luka Doncic que apunta a ‘Rookie del Año’, el niño fantasía, pero nunca llegaron. Tampoco el reto de otro novato llamado a fascinar, como es Trae Young, intentando eclipsar al esloveno (“seré mejor que él”, dijo en recientes fechas) tuvo mucho éxito. El Laker Kyle Kuzma, desconocido para el gran público, resultó el MVP, como se erigió en campeón del concurso de triples otro se-cundario absoluto de nombre Joe Harris. Por cierto, juega en Brooklyn, por si no lo sabían. Ya si añadimos que batió en la Final a un tal Stephen Curry (gran ídolo al haber jugado en la Universidad de Davidson y con su dorsal 20 retirado en la Charlotte Christian School) creerán que bebimos demasiada cerveza en uno de los muchos acogedores bares locales. Pues no pero, eso sí, les recomendamos The Cellar, donde cenamos con Kawhi Leonard en la mesa adyacente.
Cuando acaba siendo muy interesante que Jayson Tatum, de los Celtics, levante el premio del concurso de habilidades al encestar la canasta decisiva desde antes de media cancha es que algo no ha funcionado en el orden del día. Empezaron los mencionados Young y Doncic a intentar acabar las rondas antes de tiempo tirando el triple final desde muy lejos y vino el de Boston pa-ra rematarlos con su propia medicina. Nuevas generaciones, nuevos visionarios. Aunque la volcada de Hamidou Diallo (segunda mejor marca histórica de salto vertical en las pruebas pre draft) sobre Shaq con la música y camiseta de Superman, metiendo todo el codo en el aro a lo Vince Carter… Será lo único recordado de un Concurso de Volcadas que no se recordará.
Fiesta mundial y familiar
Ciudad de tamaño medio, limpia, con unas barriadas de casas coloniales espectaculares que recuerdan a otra época, en un estado ligado al baloncesto hasta la médula y los carteles de Jack Daniels anunciado junto al All Star que recuerdan las fiestas que se avecinan (y a las que llegan en coche cientos de fans, sobretodo féminas, de todo el país colapsando las calles), Charlotte re-sulta de lo más acogedora para una festividad de la familia del baloncesto. Eso sí, no deja de impresionar la cantidad de dinero que llega a generar la Liga se celebre el evento donde se celebre, apoyada por los espacios espe-ciales montados para la ocasión de marcas como la Jordan Brand, Nike o Puma que ofertan deportivas tecnológicas propias de la NASA… Y lo que vendrá.
Como vienen también las bestias (difícil buscar otro adjetivo) en edad junior del Basketball Without Borders, con 31 países representados y unos físicos en los chavales que ya no parecen de este planeta. Un hervidero de agentes, ojeadores y directivos escrutan sin perder ojo cada uno de sus gestos en una universidad privada llena de lujo (Queens University of Charlotte). Allí conver-samos con Rod Strickland sobre el hecho de que prácticamente ya no quedan bases puros... Bueno, excepto los argentinos, con Facu Campazzo y Laprovit-tola brillando en la Copa del Rey ACB en ese mismo instante. Y es que todo está conectado en este baloncesto nuestro de hoy, cuyo 68º All Star llega hasta 215 países con más de 350 miembros de la prensa presentes. Aún con ello, la fiesta ha tenido un sabor muy íntimo, para enterados y miembros de la familia desde siempre.
David Carro (Especial para Básquet Plus desde Charlotte, Estados Unidos)