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Los Ángeles Lakers están atravesando el peor momento de la temporada, ni más ni menos que en la etapa más caliente, en la que se definen los clasificados a la postemporada. Ni siquiera un LeBron James en modo playoffs está siendo suficiente ante un decididamente pobre rendimiento defensivo en lo colectivo: récord 3-7 en los últimos diez juegos y cuatro derrotas en los últimos cinco juegos, entre ellos ante rivales como Memphis, Pelicans o Suns.

Están décimos en el Oeste con un récord 30-33, a 4.5 juegos de distancia de los Spurs -actualmente octavos- y con una probabilidad de meterse en los playoffs del 2.9 por ciento, según las analíticas de ESPN. Esta realidad ha generado que desde la directiva de la franquicia se cambiara el rumbo que se había planeado en primera instancia: según informó Adrian Wojnarowski, los Lakers pausaron las negociaciones para incorporar a Carmelo Anthony.

La derrota ante los Phoenix Suns, el peor equipo de la temporada, fue el detonante. Ante las pocas chances de entrar en la postemporada, desde la organización analizan como innecesario el fichaje de una estrella del calibre de Carmelo en este momento puntual. Vale recordar que los angelinos cuentan con un roster compuesto por 14 jugadores y les falta uno para llegar al máximo impuesto por la NBA, el cual sí podrían llenar con un interno.

Anthony, de 34 años, se separó de los Rockets después de 10 juegos de temporada regular. Fue transferido a los Chicago Bulls como parte de un acuerdo financiero el 22 de enero, y finalmente fue cortado para convertirse en agente libre el 1 de febrero.