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Si dejamos a un lado el hecho conocido de que en New Orleans nadie se preocupará por defender hasta el último cuarto en caso de que todavía haya partido, lo que representa el mayor reto de este 66º All Star, la verdadera lucha por la supremacía, reside en cuál de los mayores astros del universo basquet se coronará como el mejor entre los dioses de la canasta. Y hay pique entre ellos.

El conquistador insaciable

Líder de la NBA en anotación (31 puntos de media) y en camino de una gesta para la historia como es promediar un triple doble a lo largo de toda una temporada (sólo logrado por Oscar Robertson antes, en la campaña 61-62), Russell Westbrook se presenta en Louisiana con dos MVP’s del All Star consecutivos, algo que nadie había logrado antes. ¿Alguien apuesta en contra de que buscará el tercero? Su ego no conoce rival y su energía tampoco. Enfrentado a La Barba Harden en pos del galardón al mejor de la temporada y a su ex compañero Kevin Durant por dejarle solo en Oklahoma, no hará prisioneros. Lo quiere todo, su hambre no se sacia jamás.

Buscando el merecido estreno

El All Star vuelve a New Orleans desde tres años después de la última cita en la Big Easy, pero superestrellas del firmamento baloncestístico como James Harden (29 puntos y 11 asistencias de media por partido) o Stephen Curry, niño lindo de la NBA y del mundo entero, aún no tienen en casa el trofeo de MVP en la cita astral. Y eso, dada la jerarquía que conlleva, no puede ser… Es hora de dar un paso adelante y sumarse a la historia del evento.

Los grandes tapados

Decir eso de un tal LeBron James al que le sobran galardones, pues es nada menos que el líder anotador de la historia del evento y cosecha ya dos MVP’s del mismo, puede parecer una broma, pero no lo es. Cuando ‘El Rey’ quiere se aparta a un lado y dejar brillar al resto, pero ojo como decida ser protagonista y decir ‘aquí estoy yo’. Luego están los arrestos del tipo más pequeño de toda la NBA, Isaiah Thomas, irreverente como pocos con sus casi 30 puntos por partido (2º máximo anotador de la liga) y que siempre busca demostrar que su tamaño no se mide físicamente. ¿El fenómeno Giannis Antetokounmpo? Con 22 años podría de sobra, pero nos da que al ser su primer All Star no le dejarán tirar lo suficiente para ello. Su momento llegará más adelante. Hay que ir paso a paso y los machos alfa por excelencia del campeonato no permitirán intrusos en sus cuentas pendientes.

Por David Carro (especial para Básquet Plus)