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La ausencia de Leonel Schattmann parecía traerle un dolor de cabeza muy importante a Gimnasia, de cara a este cierre de fase regular. Sin embargo, el equipo de Gonzalo García pudo salir adelante y con su victoria de ayer ante Quilmes se aseguró un lugar en la postemporada. Uno de los jugadores fundamentales para que la baja de Schattmann no se sienta tanto, es Juan Manuel Rivero. El escolta está haciendo una muy buena campaña con los patagónicos y ayer la rompió con 19 puntos, que sirvieron para quebrar el juego y asegurar el boleto clasificatorio. Luego del partido, hablamos con el Pitu.

- Fue un partido un poco raro, por las diferencias enormes que hubieron en el segundo tiempo. ¿Qué análisis te queda?

. Sí, a priori sabíamos que en estas últimas fechas de visitante Quilmes había levantado mucho. Había ganado los dos en Córdoba, a Obras el otro día... era un rival de mucho cuidad y que también venía a acercarse a la clasificación. El primer tiempo fue palo a palo y a partir de la defensa fuerte que hicimos en el tercero, aprovechamos sus tiros errados. Capitalizamos eso en ofensiva y nos sentimos mucho más cómodos en ese segundo tiempo.

- ¿Cómo resumirías lo que significa para ustedes esta clasificación a playoffs?

. Es una alegría enorme para el grupo, sobre todo por las cosas que pasamos en el año. La lesión de Juan Fernández, ahora lo de Leo Schattmann, no haber podido encontrar el punto con el extranjero, aunque ahora Shaquille Johnson se adaptó bárbaro... entonces el grupo lo necesitaba. Siempre tratamos de ir para adelante, hacer lo que nos pide Gonzalo. Que no solo es un gran entrenador, sino una excelente persona. Todo el grupo se merecía esto. Lo tomamos con una alegría inmensa, por la ciudad misma también, que hace poco no pasó un buen momento como todos saben. Creo que es un cúmulo de cosas, que hace que esta clasificación cierre por todos lados de manera positiva.

- Me imagino que no habrán sido días fáciles esos, porque si bien no les tocó jugar tantos partidos en ese momento, tener la cabeza en lo deportivo se debía volver muy complicado.

. La verdad que sí. Si bien no soy de Comodoro, ni la mayoría de los chicos, nos tocó igual de cerca. Hay mucha gente que hasta el día de hoy está tratando de recuperarse. Hay gente que ha perdido sus casas. Fue justo también el bajón nuestro. No es excusa, pero la verdad que nos tocó bastante. Por suerte nos recuperamos. La ciudad también está saliendo adelante y por lo menos le pudimos dar un poco de alegría.

- ¿Apuntan a escalar una posición más en la tabla o el objetivo era entrar a playoffs, sin pensar tanto en el posicionamiento?

. El primer objetivo era entrar a playoffs, pero ahora que ya estamos sabemos que podemos escalar un puesto más. Hay que ganar los dos partidos que nos quedan en casa, volver a hacer fuerte nuestra localía que es algo que no veníamos haciendo y después en los playoffs ya es otro tema.

- ¿Qué tienen que hacer o consolidar para llegar de la mejor forma a los playoffs?

. Creo yo que tenemos que hacer lo que hicimos con Atenas, una parte con San Martín y hoy en el segundo tiempo con Quilmes. Mantener la intensidad defensiva y en ataque hacer lo que hicimos durante todo el año, que es a lo que juega Gonzalo: el pase extra, alimentar el juego interior y los tiradores estar preparados para cuando nos tocan los lanzamientos. No va a cambiar mucho nuestra forma en playoffs, pero sí queremos estar cada vez más intensos.

- Eso creo que lo han logrado, más allá de altas y bajas: mantener esa identidad que caracteriza a los equipos de Gonzalo y sobre todo a este Gimnasia.

. Sí, es una manera de jugar muy bonita. Yo con Gonzalo estuve cinco años en Gimnasia de La Plata y lo conozco hace mucho. Siempre digo que a él le gusta jugar al básquet, le gusta jugar un básquet lindo. Nosotros tratamos de hacerlo, aunque todo el tiempo no nos sale. Por lo menos se intenta, que es lo más importante.