NBA Finals 2018

Parar a LeBron, o no hacerlo

15:45 02/06/2018 | Analizamos la estrategia defensiva de Kerr y sus Warriors para enfrentarse al jugador imparable, a la gran estrella de los playoffs NBA 2018.

(foto: Kyle Terada / Reuters)
¿Quiso de verdad el técnico de Golden State frenar al Rey? ¿O su estrategia consistía únicamente en contenerlo y en anular al resto de sus compañeros? Tras recibir 51 puntos y jugar una prórroga cualquiera diría que ni lo paró (para nada) ni lo contuvo (únicamente en el tiempo extra), aunque, in extremis, salió vencedor y con el 1-0 en el bolsillo.
 
Kerr asume que no se puede frenar el talento y el físico de una bestia baloncestística similar, sobre todo porque su capacidad de pase hace impensado doblarle marcajes para que encuentre libres a sus compañeros en posiciones idóneas para anotar.
 
No, lo que el técnico de los Warriors ha diseñado es una estrategia basada en fomentar las situaciones de uno contra uno de James, ordenando cambios defensivos en cada bloqueo para anular las ventajas que pueda sacar con el pick and roll. Claro está que alguien de la dimensión de LeBron acaba encontrando las ventajas igualmente, pero la clave es a qué precio. Pagando el peaje de consumir la posesión, el pique de balón eterno y una cantidad de minutos y responsabilidad que se van acumulando hasta llegar a los momentos claves. Es ahí cuando los Warrios introducen un pequeño pero crucial detalle alternando algunos traps (dos contra uno) que atrapan al Rey de la NBA obligándole a soltar el balón hacia unos compañeros que no asumen la presión con la misma facilidad que él, y mucho menos si llevan todo el juego contemplándole operar por su cuenta, sin haber podido entrar ellos en el ritmo de partido necesario.
 
Ayudas, ¿qué ayudas?
¿LeBron contra Curry? ¿LeBron contra el pivote Looney? ¿Ante JaVale McGee? Todas esas situaciones se vieron en el primer partido tras los respectivos cambios de asignación en los bloqueos, y la estrella de Cleveland las fue resolviendo una a una. Contra Stephen la penetración era inmediata, automática, abusando de hombro y cuerpo hasta llegar bajo la canasta con un primer paso a la derecha imparable (el error de Curry es no cederle más descaradamente la izquierda, para al menos evitar una situación tan sencilla para sumar). 
 
Con Looney delante alterna los cambios de mano intentando desequilibrar su lateralidad para de nuevo penetrar, aunque el pivote es más dado a forzarle hacia la izquierda. Con McGee optó por lanzar desde el perímetro, con ese acierto muy mejorado que le caracteriza desde hace no tanto tiempo. Paso a atrás y triple, paso atrás y tiro en suspensión desde la media distancia.
 
Lo que no llegaba ante sus embestidas eran las rotaciones defensivas en lado de ayuda. Y esto está estudiado y trabajado: lanzat contra la zona, contra el golpe de Draymond Green si acaso, pero no sacarás el pase a los tiradores de las esquinas. Dejemos huérfanos a Korver, J.R. Smith o Kevin Love de sus tiros de tres. Precisamente, lo único que pudo hacer con consistencia LeBron, y que Kerr debe solucionar, fue encontrar a Love en el poste ante un pequeño tras los cambios en el bloqueos, aprovechando así el mismatch.
 
Los Warriors son uno de los equipos de la NBA que más presiona las líneas de pase y más agresivamente defiende la línea de tres puntos. Ellos te matan desde ahí, pero no quieren que hagas lo mismo. ¿Penetraciones? Bien, con el equipo largo y atlético en cada posición que poseen están capacitados para jugarse la estrategia a cambiar cada vez tras el pick… pero claro, tampoco esperaban los 51.    
 
Alejandro Gómez (desde Oakland, EE. UU.)
Especial para Básquet Plus
 

Compartir