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Pese a la paridad inicial, no hubo equivalencias entre el actual campeón de la Euroliga y el Khimki, en la vista de los madrileños a Moscú. En gran parte del primer cuarto, fue importante lo hecho por los locales, que gracias a su intensidad y algunas conversiones desde el perímetro, estuvieron al frente varios minutos. Tras un doble de Walter Tavares, el Real Madrid pasó al frente (21-19) y no volvió a soltar el liderazgo en el tanteador.

En el período siguiente, los de Pablo Laso tuvieron un dominio total del juego y lo efectivizaron al resultado. Elevaron el porcentaje de sus tiros de campo y fueron aguerridos en defensa. Así capturaron más rebotes que su rival y consiguieron 3 tapones, con Ayón destacándose en esa faceta del juego. Se llevaron el parcial por 27 a 16 y la distancia con el Khimki era de 13 puntos.

Al regresar del descanso largo, la tónica fue la misma. Al reingresar al campo de juego, el francés Fabien Causeur siguió intratable desde la línea de 3 puntos –finalizó como goleador del juego con 22 tantos y 4/5 en triples– y se aprovechó de un conjunto ruso que no volvió a colocarse en partido. Una canasta de a tres del número 1 de los madrileños le colocó el 70 a 50 y le bajó la persiana al tercer chico.

En los últimos 10 minutos, el equipo de Pablo Laso mantuvo la distancia y Gabriel Deck cobró protagonismo en la dinámica del conjunto blanco para conseguir puntos y rebotes. Además, Facu Campazzo también hizo su aporte al asistir a sus compañeros. Con la victoria por 100 a 75, la Casa Blanca logró su 20° triunfo en Europa esta temporada y sigue en busca de la mejor posición en la fase regular.