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Cleveland perdió 114-102 ante los Spurs en la jornada de martes y acrecentó la crisis y la tensión existentes en una franquicia que actualmente ocupa el tercer puesto de la Conferencia Este (récord 27-19). Sin embargo, dentro de tantas pálidas, LeBron James y su partido de 28 puntos fue como un oasis en el desierto: con esa cantidad superó la barrera de los 30.000 puntos en el marco de la NBA, transformándose en el séptimo jugador en la historia en lograr tal hazaña. 

En el cierre del primer cuarto, más precisamente a falta de 1.1 segundos, se produjo el punto de inflexión. A partir de ese momento LeBron se unió a un grupo selecto compuesto por Kareem Abdul-Jabbar (38.387), Karl Malone (36.928), Kobe Bryant (33.643), Michael Jordan (32.292), Wilt Chamberlain (31.419) y Dirk Nowitzki (30.837). Pero la particularidad más importante radica en que fue el jugador más joven de todos en llegar a los 30.000 puntos:

Eso sí, si se toman en consideración la cantidad de partidos que necesitó cada cual para lograrlo, la ecuación varía:

Antes del juego en Texas ante San Antonio, el propio LeBron se había felicitado a sí mismo con el siguiente posteo en instagram: “¡Quiero ser uno de los primeros en felicitarte por este logro que conseguirás esta noche!”, escribió James. “Solo unos han podido llegar y aunque sé que nunca ha sido uno de tus objetivos desde el principio, por favor trata de tomarte un momento para recordar cómo lo has hecho. La casa a la que llegas tiene solo seis sitios por ahora, pero uno más será añadido y debes estar muy orgulloso y honrado por ser aceptado dentro. Hay tantas personas a las que agradecerles, que han ayudado a que esto sea posible (así que agradéceles a todos) y cuando finalmente consigas tu momento (solo) para sonreír, mira hacia el cielo y di ¡GRACIAS! Entonces con eso dicho, Felicidades nuevamente Joven Rey".