Puerto Rico

La conmovedora carta de Piculín Ortiz tras su recuperación

02:32 14/12/2016 | Luego de cumplir sus 600 horas de servicio comunitario y estar recuperado, el histórico ex jugador escribió una emotiva carta en Twitter.

Terminando de dar vuelta una página complicada de su vida pero con la alegría de que el sol vuelve a salir, José Piculín Ortiz aseguró sentirse otro ser humano después de haber cumplido las 600 horas de trabajo comunitario impuestas desde su sentencia del 2011. Histórico y una de las leyendas vivas de Puerto Rico, el ex pivote había sido encarcelado en julio de este año por imcumplimiento de las horas de servicio, sin embargo esta deuda la saldó durante los últimos días.
 
Piculín había recibido una pena legal por su delito de posesión de marihuana con intenciones de distribuir. Desde entonces pasó seis meses en cárcel, nueve meses más en arresto domiciliario y también se lo sentenció con 600 horas de servicio comunitario. Esto último lo terminó completando estos últimos días en varias escuelas y colegios, dando charlas sobre prevención y cuidados.
 
A modo de agradecimiento, el histórico ex jugador decidió redactar una carta hacia las instituciones comentando los cambios que han habido en él desde entonces. La rehabilitación ha sido un éxito, y ahora lo mejor está por venir. A continuación compartimos su carta difundida a través de Twitter:
 
El 29 de junio de 2011, fui apresado, más adelante enjuiciado y posteriormente encarcelado. ¿Mi sentencia? Cárcel, hogar de rehabilitación y 600 horas comunitarias. Todo lo anterior, muy buscado, desde el día uno levanté mis manos y asumi mi responsabilidad.
 
Hoy, celebro lo vivido y lo por vivir... cumplidas mis horas comunitarias, me toca enfocarme en lo bueno y agradecer. Es por esto que agradezco a cada una de las escuelas y colegios que solicitaron mi charla sobre uso y abuso de sustancias controladas. No se equivoquen, no les agradezco por haberme escrito y solicitado la charla, mi agradecimiento es por todo el respeto, cariño y por mi sanación.
 
Yo soy otro ser humano luego de nuestras charlas. Todos los jóvenes con los que conversé y que a su corta edad ya tienen problemas con la justicia o con las drogas, sepan que siempre hay gente que les pueden dar la mano y que están dispuestos a escucharlos. Como les mencioné, hablen, busquen ayuda. Todo problema, tienen solución.
 
A los que se identificaron conmigo porque sus padres utilizan drogas o están encarcelados, sus historias en ocasiones en silencio, lograron que realizara una gran introspección sobre el dolor que causé a mi familia. He llorado mucho, en las charlas y luego de ellas. He descubierto cuánta necesidad de orientación, apoyo y amor tiene gran parte de esta juventud que pude conocer. Estuve visitando escuelasy colegios todos los días de lunes a viernes desde septiembre 6 hasta el pasado viernes 9 de diciembre del 2016. Sin correr una cancha ni mover un balón, he logrado el mayor de mis triunfos, impactar positivamente la vida de muchos jóvenes.
 
Soy realista, no puedo salvar o evitar que todos a los que les hablé tomen el rumbo equivocado, pero les aseguro que a alguno lo detuve y lo hice desistiry eso para mi es mejor que cualquier gesta deportiva. Como les mencioné en las charlas, siempre tenemos cerca a seres que nos aman y que estarán en las buenas y no tan buenas, solo tenemos que abrimos, hablarles y ellos escucharán.
 
Ahora, me queda esperar que próximamente culmine un capítulo difícil de mi vida, para continuar con la mejor parte de todo, vivir, soltar angustias y darle paso a mis grandes planes: una conciencia tranquila.
 
¡Dios los bendiga, cuenten conmigo siempre!
 
 

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