Jordan no está solo: otros que rompieron acuerdos verbales
11:37 09/07/2015 | Después del cambio de rumbo del pivote, quien había acordado con Dallas pero terminó renovando con los Clippers, repasamos antecedentes similares.
Brand dejó plantado a los Clippers; Turkoglu eligió Toronto sobre Portland; y Boozer dejó Cleveland para ir a Utah.
El caso de DeAndre Jordan sacudió la jornada del miércoles en la NBA. Por la mañana empezaron a circular versiones de que el jugador estaba reconsiderando su decisión de acordar de palabra un vínculo con Dallas (4 años y 80 millones de dólares). Y finalmente, la historia terminó para otro lado, firmando su renovación con los Clippers después de una reunión con varios jugadores y el entrenador Doc Rivers, quienes no lo dejaron abandonar su casa en Houston hasta la medianoche, cuando se terminó la moratoria de la NBA y pudo firmar oficialmente su nuevo vínculo.
Se hablará mucho de Jordan y su falta de palabra, pero no es el único caso. Otros jugadores tomaron caminos similares a Jordan en el pasado. En julio del 2008, los Clippers pensaron que tenían cerrada la renovación de Elton Brand por cinco años y 70 millones de dólares (después de habló de una suma que llegó a 81 millones). Pero el interno cambió de opinión y acordó con Philadelphia por 82 millones.
En julio del 2009, Hedo Turkoglu había tomado la decisión de dejar Orlando para firmar un contrato con Portland, pero el día después del supuesto acuerdo, aceptó una oferta de 53 millones y 5 años de parte de Toronto. Las versiones indican que su esposa prefería una ciudad por encima de la otra.
Más atrás en el tiempo estuvo el caso de Carlos Boozer, quien fue liberado de su opción con Cleveland para la 2004/05 para después firmar un nuevo acuerdo, 41 millones por seis años. Hubo apretón de manos, pero el interno terminó firmando con Utah por 68 millones.
También se dio algo parecido con Billy Donovan, actual coach de Oklahoma City Thunder. En 2007, fue anunciado como nuevo entrenador de Orlando, pero dos días después se arrepintió y tuvo que acordar su salida para regresar a la Universidad de Florida.
Está claro. DeAndre Jordan no está solo en esta movida de romper acuerdos de palabra.
