Hure: "Estoy viviendo algo soñado; tener esta revancha fue impensado"
21:15 23/05/2017 | El cordobés habló con Básquet Plus sobre su presente en Paulistano, finalista de la NBB de Brasil. Su lugar en la liga vecina, su año con Sionista y su rol.
Hure y una actualidad soñada en Brasil
Las revanchas del deporte siempre presentan cosas similares a lo que atravesó y vive Daniel Hure. Después de haber de lamentablemente haberse ido al descenso con Sionista la temporada pasada, todo cambió para esta 2016/17 y el argentino encontró su lugar en Brasil, en la NBB y con un Paulistano que hace unos días se convirtió en uno de los finalistas por el título.
Sensaciones felices para el nacido en la ciudad cordobesa de Valle Hermoso, de casi 7 mil habitantes y a 75km de Córdoba Capital, que se encontró con una actualidad impensada desde que armó sus valijas a finales del 2016 para probar una experiencia totalmente nueva en Sao Paulo. Pocos hubiesen imaginado que su vida cambie drásticamente de esta forma, pero la más importante es que el ala pivote no perdió esa esencia que tanto lo ha caracterizado, aquella dedicación al trabajo haciendo lo que tanto ama: el básquet.
Siendo una de las voces experimentadas del Paulistano y mientras el equipo aguarda por el segundo finalista (será Baurú o Pinheiros, quienes en este momento están definiendo el último punto de la serie de semis), el Cabrito dialogó con Básquet Plus y explicó las bellas sensaciones que lo inundan. En Brasil consiguió llegar a una final de liga, algo que acá no ha logrado hasta ahora, pero no se conforma y se anima a soñar con la posibilidad de ganar el título. De todas formas, ¿quién puede contrarrestar esa ilusión después de la temporada fantástica que ha hecho desde lo personal y lo colectivo?
- Los otros días pensaba cómo jugadores como vos o Dami Palacios en el Vasco que se hicieron con un lugar en Brasil. Sin haber tenido buenas oportunidades acá encontraron una chance interesante en Brasil, las tomaron, las aprovecharon y están logrando cosas importantes.
. Sí, el otro día lo hablaba con Damián porque tengo relación, y también lo hemos vivido en su momento porque compartimos el mismo representante y Gustavo Monella en su momento, cuando me habló de esta oportunidad de venir a Brasil, me dio el ejemplo de Damián que se sintió mucho en el Vasco y se quedó automáticamente en el club. Y para mí, el irme la temporada pasada al descenso con Sionista me dolió mucho desde lo personal por una cuestión de muy arraigada a mí de tantos años en el club y de haberme formado ahí. Por eso hoy por hoy, vivir este momento con Paulistano, tampoco era algo que me imaginaba. Gracias a Dios al comienzo de esta temporada tenía ofertas para quedarme en Liga o ver qué otras posibilidades había, no sé si me convenían tanto desde la parte económica y por todos los cambios que se están viviendo en la Liga. Me surgió la posibilidad de irme a Libertad de Paraguay dos meses y volver a Argentina para un recambio, ver qué podía pasar en diciembre y entrar en el receso. Terminé perdiendo las finales en Paraguay, quedé libre y salió lo de Brasil, le pedí a Gustavo que me expliqué bien cómo era porque al estar tantos años en liga argentina no sabía cómo era la experiencia de estar en otro torneo tan importante como es el de Brasil. Sabía que era competitiva y otras cosas, pero no sabía demasiado además de eso. Me comentó que el equipo que me quería era Paulistano, que quedó eliminado en semifinales de Liga Sudamericana, que el entrenador fue asistente de Rubén Magnano en los últimos cuatro años y que el club era el más importante a nivel social de San Pablo. Acepté, opté por tomar esta experiencia y ver cómo salía sabiendo que si salía algo importante en Argentina me quedaba, pero en el momento surgió esta posibilidad y la verdad es que no lo dudé.
- ¿Con qué te encontraste?
. Llegué a un club que la verdad es modelo en Brasil, en cómo trabajan, en la infraestructura que poseen y a nivel social-deportivo. Desde lo que me corresponde a mí esto es algo de primera, comparado con los mejores equipos de Argentina.
- La idea del equipo es que llegues para darle ese toque de experiencia me imagino.
. Sí, el proyecto del club para esta temporada que empezó fue esa. Hubo un recambio antes de arrancar esta temporada, apostaron a un equipo joven, es un equipo donde tenemos 3-4 jugadores con muchísimo talento que son proyección internacional. El proyecto lo podés comparar como si fuese un Bahía Basket, porque son todos jugadores jóvenes, la base del equipo son dos chicos de 20 y 21 años y de hecho el promedio de edad es de 22 años. Después somos 4-5 jugadores que tenemos entre 28 y 32, pero Gustavo confía mucho en el talento de los jóvenes y el respaldo de los grandes en sumar desde la experiencia, desde la parte defensiva, de tomar decisiones y saber llevar a los jugadores jóvenes.
- ¿Y cómo los agarró esta temporada donde claramente están superando las expectativas?
. La verdad es que estamos viviendo algo soñado. El primer objetivo era entrar entre los primeros ocho, se llegó a estar ahí porque quedamos 6° en la regular, pasamos el primer playoffs cuando muchos no daban que podíamos superar ese primer cruce porque era un equipo que había quedado 11° pero con mucha experiencia. Ese primer playoffs lo ganamos en quinto juego en casa, después vino Franca que había quedado 3° en fase regular y esperaban en cuartos, donde ganamos el quinto juego en cancha visitante contra un estadio con 6 mil personas de Franca, algo totalmente impensado. Y ahora llegamos a semifinales donde ya llegábamos bien y le ganamos bien a un rival que era duro como Vitoria, y hoy esperando el rival de las finales, trabajando duro pero con la cabeza consciente de que tenemos que saber que el camino es seguir trabajando constantemente.
- ¿Y en la parte individual?
. Sinceramente me siento con protagonismo, cómodo en el equipo. Es un equipo donde los 10 jugadores pueden jugar y eso me hace sentir bien. Mi rol es el mismo que tenía en Argentina, tampoco por venir a jugar acá a Brasil voy a cambiar mi forma de jugar y ser. El entrenador me pidió desde un primer momento que esté en la parte defensiva, que lo que les gusta del argentino es ese tema de la entrega, del sacrificio, y yo me he caracterizado siempre por lo mismo. Durante la regular he tenido buena participación, quedé en el Juego de las Estrellas que ha sido una experiencia muy linda y en ese sentido me ha ido muy bien. No esperaba todo lo que me pasó. Y hoy estoy con la ilusión de salir campeón en Brasil. Obviamente con todo el respeto debido porque todavía se está jugando la otra semifinal, y sabiendo que también va a ser durísimo. Pero ya estamos aquí y soñar es gratis.
- El rol que estás jugando ahí desde la experiencia tranquilamente como un referente. Tal vez no desde un liderazgo bien marcado pero sí guiando desde el ejemplo a los más chicos del equipo. ¿Lo sentís así?
. Mirá, nunca me sentí ni ejemplo ni con un rol de líder, porque tampoco soy un jugador de mucho goleo. Yo siempre me caractericé por ser un obrero, el trabajo y el sacrificio siempre están desde el primer momento, desde un entrenamiento el dar el 100% mío. Me podrán salir bien o mal las cosas, pero trato que desde ese lado nunca se me recriminen las cosas, por lo que en todos los clubes donde estuve traté de dar ese 100% de mí. No me pongo de ejemplo ni nada, lo mío es sacrificio y entrega por mi profesión, que es la que amo. Ya fuese estando en Argentina, que estuve 12 años en Sionista, más mi paso por Olímpico o estando acá en Brasil, no voy a cambiar mi forma de ser, voy a seguir siendo el mismo y voy a dar el 100% de mí. Puedo hacer bien o mal las cosas como te decía, pero en la parte de la entrega no me pueden reprochar nada ni tampoco puedo hacerlo yo. Hablar de referente me parece que es fuerte y grande.
- Igual íbamos por el lado de si vos observás ese sacrificio que te caracteriza como un aspecto que los chicos toman, para ser igual de dedicados.
. Ojalá que sea así, que ellos tomen la forma de trabajar, de cuidar y de entrenarse de uno, que no solo es mía sino también de mis compañeros más grandes que quienes creo que también son más referentes que yo. A mí no me conocían antes de llegar acá, quizá por eso lo siento así, era un NN aquí en Brasil. Yo estoy para sumar, como le dije a Gustavinho, estoy para ayudar ya sea jugando 5 o 30 minutos, no me interesa eso. Más aún en este momento, donde estoy por jugar una final de liga nacional acá en Brasil donde en Argentina nunca tuve la posibilidad de jugar unas finales. Hoy disfruto ese momento.
- ¿Con qué liga te encontraste y qué variaciones viste respecto a la nuestra?
. Deportivamente son similares, obviamente que la historia de nuestra Liga con más de 30 años le da otro tipo de prestigio y trayectoria, pero en lo deportivo yo no sentí mucha diferencia y de hecho me acomodé rápido. Atléticamente acá los jugadores son muy buenos todos, tácticamente en mi caso todo es muy bueno y se trabaja muy bien en la parte de fundamentos individuales y la parte táctico-defensiva. La verdad es que al equipo que llegué tiene cosas muy parecidas a cómo estaba acostumbrado a trabajar en Argentina. Me tocó trabajar con muchos entrenadores y siempre se caracterizó la parte táctica y defensiva, y llegué a Brasil y me pasó lo mismo. Gustavinho es un entrenador joven pero tiene la filosofía como la nuestra, y en ese sentido encajé gracias a Dios. Cuando llegué no sabía dónde llegaba, había visto las estadísticas y algunos partidos y demás, pero cuando llegué acá no conocía más que eso. Y a nivel liga me parece que también es parecido a Argentina, hay equipos que están con jugadores referentes, de selección, que acá son históricos, hay jugadores jóvenes que han aparecido que son muy buenos, y la verdad es que estoy viendo mucho básquet tanto de Argentina como de Brasil y son similares. Obviamente que uno sabe que Brasil siempre se caracterizó por tirar y jugar un poco más rápido, eso está sí y por momentos también me siento cómodo. Vamos a ser realistas, al generarse un juego abierto hay momentos donde me siento cómodo porque me llegan tiros abiertos al principio de una ofensiva, cuando en Argentina no me pasaba eso hoy los estoy tomando pero porque también está el plus que te dejan y en Argentina quizá se juega un poquito más lento.
- ¿En qué momento hicieron el clic como equipo que esto de llegar a una final como ahora se podía dar?
. Mirá, nosotros en la fase regular hubo un momento donde perdimos seis partidos seguidos, de estar peleando de los puestos 4 a 6 sintiéndonos cómodos en un momento nos agarraron y nos dieron ese fuerte golpe. Durante esos seis partidos perdidos obviamente que el perder hace que la cabeza te maquine mucho, pero a su vez seguimos trabajando y madurando como equipo. Hicimos como un clic cuando ganamos el primer partido de visitante contra Minas después de esas seis derrotas, y ahí me parece que el equipo empezó a evolucionar mucho. Si no me falla la memoria, de los últimos 10 partidos llegamos a ganar 9 y llegamos a playoffs de la mejor forma. Es verdad que los playoffs son otro torneo, y al ser un equipo joven de la mayor parte de jugadores que tiene mayor protagonismo, era todo un desafío ver cómo podíamos responder a eso. Y tuvimos pruebas muy duras, porque el tercer partido que perdemos contra Cearense se nos nubló todo el panorama. Pero la verdad es que el equipo respondió bárbaro jugando allá, ellos se hicieron un estadio nuevo con 3 mil personas y el equipo jugó fantástico desde el primer minuto hasta el cuarenta. Ganamos, vinimos acá y también ganamos el quinto. Cuando pasamos se nos vino Franca que era un equipo muy parecido a nosotros, con jugadores jóvenes de mucho talento, y jugamos esos tres partidos contra casi 6 mil personas en un estadio hermoso. Fuimos, ganamos el tercer partido allá, pero vinimos y perdimos acá el cuarto juego por treinta puntos, y fue una cachetada que no podíamos creer. Pero vamos y ganamos el quinto juego allá, jugando un básquet tremendamente táctico y haciendo todo lo que nos habían pedido. Me parece que eso también fue clave, poder pasar esos dos playoffs teniendo muchas adversidades nos hizo crecer y ahí también creer que podíamos. Y contra Vitoria me parece que hicimos el mejor juego nuestro a nivel colectivo y con individuales que no teníamos pensadas, porque nosotros por ejemplo tenemos a George De Paula que es nuestro base, uno de los mejores proyectos del país, que jugó el primer partido y cuando llegamos acá tuvo un virus por varios días, jugamos los últimos dos partidos acá sin él y el tercer base del equipo con 18 años metió 20 y 18 puntos acá de local, y eso es gracias al respaldo que nos damos todos y la confianza que nos da Gustavinho a todos.
- ¿Sintetizás ya este año por todo lo que pasaste o todavía no te querés anticipar? Porque está claro que pocos optimistas se podían imaginar esta temporada soñada que estás teniendo.
. Ni hablar, sí, porque aparte este año en Brasil se ha dado una liga atípica donde los cuatro primeros de la regular, que evitaron el primer playoffs, fueron eliminados en ese cruce de cuartos de final, terminamos pasando esos cruces los equipos clasificados del 4° al 8°. La verdad es que uno va viendo que el año es bueno, como también supe en un momento que hubo varios años míos que no fueron buenos, pero tampoco quiero hacer un balance final ahora porque me falta jugar esto último, lo más lindo por lo que un jugador de básquet quiere competir, el llegar a jugar una final de torneo. Hoy por hoy estoy disfrutando del momento, trabajando a consciencia como siempre, respetando todo lo que venimos haciendo y todo lo que nos inculcó el entrenador para llegar adonde estamos. A nivel individual si querés que te diga algo obviamente es muy positivo venir acá a Brasil, disfrutando de esta nueva experiencia, pero hoy solo quiero disfrutar esto. Con la ansiedad obvia porque todavía nos quedan un par de días más para arrancar las finales, pero tratando de mantenernos enfocados porque un parate de 13 días desde que clasificamos desde semifinales al primer partido de la final de este sábado hay mucho tiempo. Pero estamos felices, todos trabajando de la misma forma, creyendo que podemos pero tampoco agrandándonos porque así llegamos a la final. El año pasado mío no había sido bueno en todo sentido, porque colectiva e individualmente el año había sido muy malo con Sionista y ahora tener una revancha en lo individual y personal acá en Brasil me parece que está bueno.
Lucas Leiva / [email protected]
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