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Con un gran partido no sólo de Manu Ginóbili, pero del equipo en general, los Spurs ganaron con mucha autoridad, en una cancha difícil como la de Atlanta. Fue por 103 a 78, en un encuentro que remataron desde temprano.

Desde el primer minuto, se veía que San Antonio había entrado con una gran intensidad defensiva. Los Hawks apenas lanzaron un 26% de cancha en esos primeros 12 minutos y en el otro campo, sufrieron un excelente ingreso de Manu Ginóbili, con 7 puntos en 5 minutos. El bahiense complementó todo lo que los texanos estaban haciendo atrás y de esa manera, el parcial los favoreció por 22 a 13.

El segundo período iba a ser un calco del primero. Si podía ser posible, San Antonio subió incluso un poco más su intensidad en la marca, dejando a su rival en 22% de cancha y apenas 12 puntos. De hecho, los 25 con los que terminó Atlanta el primer tiempo, es la cifra más baja para cualquier equipo en esta temporada. En el otro campo, Kawhi Leonard empezaba a ser determinante y la diferencia subió a 22: 47-25.

A los Hawks se les abrió el aro en el tercer cuarto, de la mano de un encendido Paul Millsap (17 en ese tramo), pero de poco les sirvió. Los Spurs contuvieron bien cualquier intento de remontada y se metieron a los 12 minutos finales con todo decidido hacía rato: 79-55.

Ya poco hubo para ver de ahí en adelante. San Antonio no sufrió, le dio descanso a sus figuras y terminó con una tranquila victoria por 103 a 78, demostrando el gran momento que vive en este final de 2015.

Kawhi Leonard fue nuevamente la figura del ganador, terminando con 22 puntos y 8 rebotes. Tan o más importante fue lo de Manu Ginóbili y sus 17 tantos en 19 minutos. Por su parte, en los Hawks no fueron suficientes los 22 de Paul Millsap, único jugador de los de Budenholzer en llegar al doble dígito.

Manu Ginóbili: 17 puntos, 3 rebotes, 1 asistencia, 1 falta cometida, 4 pérdidas, 2-4 en dobles, 3-3 en triples y 4-5 en libres durante 18:35 minutos de juego.