Conocé la cruda historia de vida de Davis, el héroe de Instituto ante San Lorenzo
09:39 18/11/2017 | Todo lo malo pasó en muy poco tiempo para Dwayne Davis, quien con 13 años tuvo que hacerse cargo de sus hermanos por la muerte de su madre.
"Tres personas viviendo en una camioneta, sin saber cuando sería nuestra próxima comida... fue muy duro. Sabía que tenía familia, pero no quise pedir ayuda. Yo soy del tipo de personas que lo hago todo por mí mismo", expresó ante los micrófonos de Yahoo! Sports hace algunos años Dwayne Davis, goleador del clásico cordobes de anoche gracias a sus 30 puntos. Una historia durísma que comenzó cuando tenía 13 años y tuvo que crecer de golpe para hacerse cargo de sus dos hermanos menores.
¿Cómo llegó a esa situación? La muerte de su madre por lupus fue el desencadenante, que luego trajo aparejado el abandono de su padrastro. Con 13 años tuvo que rebuscársela para vivir, no solo por él sino que además por sus dos hermanos. Los medios para que puedan alimentarse fueron los que pudo: recorrían los refugios y trabajó en una juguetería, pero en la época de vacas flacas robo consolas de videojuegos para poder comer, tal como se detalló en una reseña realizada por Diario Marca.
En Philadelphia, de donde es oriundo, el invierno es realmente frío y ellos se las ingeniaban para no tener que sufrirlo: "No teníamos dinero para gasolina, así que arrancaba el motor, ponía la calefacción media hora y lo apagaba después hasta que pasaran dos horas y pudiera encenderlo para calentarnos otra vez. Es muy difícil hablar de esa época. Luchabas por sobrevivir, y no podía desfallecer, porque mi hermano y mi hermana dependían de mí".
Así transcurrió su vida, entre esa eterna incertidumbre y los playgrounds de Philadelphia, en donde podía olvidarse de todo durante el tiempo que jugaba al baloncesto. Tanto fue el tiempo que pasaba en esos recintos que empezó a perfeccionar su tiro a un punto tal que quienes jugaban con él lo llamaban Rifle. Esa cualidad lo acompaña hasta la actualidad y anoche volvió a demostrarlo, al despacharse con una soberbia actuación ofensiva (27 puntos y 7/12 en triples) ante una de las mejores defensas del país, como lo es la de San Lorenzo.
El punto de inflexión se produjo con la aparición del entrenador Larry Tindall, que fue importante en su desarrollo y desembarco en el básquet universitario. Antes de eso tuvo que convertirse en el primer miembro de su familia en terminar el instituto (Strawberry Mansion High School), para luego destacarse en NJAA con Midland College. En 2012 llegó a la NCAA, representando a Southern Mississippi, en donde en su año senior jugó 34 partidos y promedió 16 puntos (53,2 por ciento en dobles y 41,3 por ciente en triples), 4.5 rebotes y 2.6 asistencias por encuentro.
La carrera profesional de este jugador de 27 años y 1.96 metros de altura lo ha llevado a jugar por Murcia, Koroivos (Grecia) y actualmente Instituto de Córdoba. En la Gloria acumula 5 partidos y unas muy buenas estadísitcas: 21 puntos, 5.2 rebotes y 3 asistencias. Quizás la manchita la produzca el 3.8 de pérdidas por encuentro que tiene como media.