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Hace tiempo que nos quedamos sin adjetivos para describir a Manu Ginóbili. Por eso, cualquier calificativo que usemos seguramente se quedará corto, a la hora de intentar contar lo que jugó el bahiense esta noche ante los Blazers. El 20 de los Spurs tuvo una actuación para el recuerdo y fue fundamental para que San Antonio derrrote a Portland por 116 a 105 y quede a un solo triunfo de los playoffs.

De hecho, tan buena fue la tarea de Manu, que pasará a la historia como una de sus grandes actuaciones, no solo de la temporada, sino de su carrera: por tercera vez en la misma, terminó un partido con un 100% de eficacia, lanzando 7-7 de cancha. En las anteriores dos ocasiones solo había tomado cuatro lanzamientos, por lo que sin dudas éste fue su rendimiento más eficaz. En total, Ginóbili finalizó con 17 puntos, 3 rebotes, 1 asistencia, 1 robo, 4-4 en dobles y 3-3 en triples durante 19 minutos. Ah, y como si esto fuera poco, tuvo un pasaje gigantesco en el último cuarto para abrir el partido.

Portland dominó con pequeñas ventajas durante toda la primera mitad, pero San Antonio siempre se mantuvo a tiro y consiguió el sobrepaso en el tercer período. Todavía con el juego igualado, Manu tuvo una ráfaga de ocho puntos en menos de un minuto, sumando además un rebote y un robo, para abrir una brecha de doble dígito que los Spurs ya no entregarían. El bahiense sumó 10 puntos en el último cuarto y fue la gran figura del equipo, más allá de los 28 puntos de LaMarcus Aldridge y de los 17 que consiguió Dejounte Murray. Por el lado de Portland, no fueron suficientes las 33 unidades de Damian Lillard.

Con este resultado, San Antonio quedó a una victoria de asegurar su ingreso a los playoffs, faltándoles dos encuentros por disputar: Sacramento (local) y New Orleans (visitante). ¿La mala noticia de la jornada? Ganaron Denver, Oklahoma City y New Orleans, tres rivales directos en la furiosa lucha del Oeste.