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Shane Battier es de esos jugadores altruistas que lo dan todo por el equipo y aquellos que construyeron una carrera de atrás para adelante en el juego, mostrando la fiereza defensiva para ganarse un lugar de preponderancia dentro del equipo. Los Grizzlies lo eligieron en el sexto lugar del Draft del 2001 y desde allí arrancó para tener un gran paso en Houston, junto a Luis Scola y Tracy Mc Grady, para luego coronarse como jugador de equipo y campeón de la NBA en Miami, junto al Big Three de LeBron James, Dwyane Wade y Chris Bosh.

En una nota para el Podcast Forgotten Seasons, el exjugador de 43 años recordó momentos de su carrera, especialmente aquella temporada increíble con los Rockets y las 17 victorias consecutivas en el 2009 y detalles de su preparación para enfrentar cada noche al mejor jugador del oponente, una tarea tan difícil como agotadora.

En un momento fue consultado por los jugadores que lo hacían trabajar de más y con los que él sabía que iba a tener una noche larga. Battier nombró figuras de renombre como LeBron o Kobe, pasó por un Carmelo Anthony en versión joven y como para agrandar aún más el respeto de Manu, también puso a Ginóbili entre los difíciles de verdad.

“Estos me hicieron trabajar mucho, jugadores como Melo (Carmelo Antohny), su versión joven era un monstruo, Ginóbili era tan top, muy top, que ahora verlo en el hall of fame es increíble, Paul Pierce era muy difícil. También tomé un poco a Dirk, el joven LeBron, había tantos buenos aleros. Kobe era el mejor, pero era divertido enfrentarse a ellos. Iban a ser noches largas cuando los enfrentáramos, pero esperaba hacerlos trabajar y tomar algunos tiros más y que su eficiencia bajara”, recordó Battier sobre sus batallas estelares en la NBA.

Sus últimos años de baloncesto fueron los que se llevaron las mayores luces con los títulos en el Heat, pero a decir verdad a él no le importaba nada de eso, solo quería defender al mejor por y para el equipo. Que los reflectores se los lleven otros, mientras él ya preparaba su próxima batalla, sabiendo que con su pericia defensiva el equipo estaría más cerca del objetivo y el Big Three del Heat siempre sabrá que detrás de ellos había un hombre que los defendía a capa y espada; y ese era, Shane Battier.

Mauro Osores / [email protected]

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