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Los Warriors se enfrentan a una dura offseason luego de esta temporada, y hay ciertas cosas que deberían haber resuelto este verano. Una de ellas es pensar qué van a hacer con los contratos pendientes de renovar. No pueden mantener el mismo equipo unido por siempre, ya que pagarles a todos los dejará con un payroll total de 500 millones, algo jamás visto ni imaginado. A su vez, quizás hasta no sea posible, considerando cómo se mueve el Cap Space en relación al aumento de contratos, generalmente de 8% cada año.

En Golden State puede ser que deban elegir entre Wiggins, Green y el mismo Poole. Al final del año, el canadiense, que viene de ser un All-Star, junto al joven serán Agentes Libres. Sí, Jordan Poole es restringido, y pasó 3 años en la franquicia para poder extenderlo por encima del Cap. Sin embargo, depende lo que decida Draymond Green (Player Option de 27 millones) puede complicar mucho las cosas. Es probable que deban elegir a alguien.

La alternativa de los Warriors es renegociar un acuerdo con Wiggins, que no sea extraorbitante y ayude al equipo al largo plazo, e imitar esa acción con Draymond Green. De mediar eso, le pueden dar un buen contrato a Jordan Poole, pero si un equipo como Orlando rumoreado últimamente, le ofrece un máximo como el recibido por Ayton, los Warriors deberán mover piezas para retenerlo o dejarlo ir. Por otro lado, si Green efectivamente sale a buscar su máximo, deberían tener la posibilidad de igualar. Qué tan factible es ese movimiento para Draymond es una incógnita aún, pero desde ya es muy poco probable que alguien le otorgue tal contrato.