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El Trash Talk está metido de lleno en la NBA, hablar, desafiarse, burlarse entre los protagonistas está permitido y por eso que muchos de los jugadores estrellan lo hacen. Primero porque tienen con qué respaldar esa actitud y segundo para demostrar su status ante colegas de menor relieve.

En este caso Anthony Edwards, uno de los finalistas a rookie del año la temporada pasada, empezó con todo su temporada metiendo 29 puntos, además de 6 rebotes y 3 asistiencias y siendo junto a Karl Anthony Towns y D’Angelo Russell uno de los pilares del triunfo de Minnesota ante Houston.

El duelo comenzó a definirse en el segundo cuarto cuando los Wolves se despachan con 40 puntos y muchos de la mano de Edwards, quien tras una seguidilla de anotaciones, miró a la banca de los Rockets y se despachó con unas palabras que podían sonar a tono de burla.

Por eso que en la conferencia de prensa pospartido, el perimetral fue consultado sobre ese episodio y sin tapujos expresó: “Sí, le estaba diciendo al entrenador que pidiera un maldito tiempo muerto. Necesitas un tiempo de espera. ¡Estoy caliente! "

Un poco de arrogancia para Edwards, pero su nivel va a ser este en la temporada, Minnesota se puede ilusionar y si el récord va a ser positivo como empezó, nadie se va a escandalizar por lo que haga o diga el joven si rinde dentro de la duela.