Selección Argentina

Junior Cequeira y una experiencia soñada en Turquía 2010

10:59 13/12/2020 | Las vueltas de la vida lo pusieron entre los doce de un mundial, nada y nada menos que durante el lustro de la Generación Dorada. Junior Cequeira y su experiencia en Turquía 2010.

Junior Cequeira con la selección ante Barea (Foto: CABB)

Las previas a los torneos importantes de la selección nacional  estaban precedidos por Sudamericanos o Panamericanos, certámenes de fogueo para figuras locales y jóvenes valores, donde Junior Cequeira venía formando parte desde hacía un par de años y en ese 2010, con la participación en el Sudamericano de Nieva, Colombia, quedó en una lista de 25 jugadores previos al mundial.

Tras el segundo puesto en el certamen continental, Cequeira retornó al país para trabajar a las ordenes de Julio Lamas en Obras Basket, mientras que en España, donde Argentina estaba jugando amistosos, se comunicaba la baja de Cantero debido a un desgarró quedando fuera de la Copa del Mundo.

“Volví del Sudamericano y me puse a las ordenes de lo que era mi nuevo club, Obras y cuando estaba por arrancar el entrenamiento, Julio Lamas delante de todos me dijo que no iba a entrenar porque le acaban de avisar que tenía que viajar a Madrid para sumarme a la delegación que iba a jugar el Mundial”, relató el base chaqueño en una charla para el podcast CABB Radio.

A pesar de haber generado sorpresa su llamado, habiendo estado en distintas convocatorias desde el 2007, para Junior no era tan descabellado soñar con ese lugar por detrás de Prigioni, dado que no había un número puesto para esa función: “Yo venía de una continuidad en la Selección, el año anterior al mundial había jugado un Panamericano,  en otro había jugado un Sudamericano donde fuimos campeones, en el Premundial había quedado afuera. Entonces internamente estando Sionista me había propuesto volver a la selección e ilusionarme con jugar el Mundial”.

La lesión de Cantero fue la cuota de suerte que Cequeira tuvo para abrirse un lugar, pero siempre se dice que a la suerte hay que acompañarla y en el caso Junior hubo mucho trabajo mental previo para que el rendimiento en el mundial sea por demás bueno en el tiempo que le tocó estar en cancha.

“Mi objetivo de máxima fue jugar el mundial ese año, estuve en el Sudamericano y después por la desgracia de Juan (Cantero) me tocó a mí y sinceramente me sentí preparado mentalmente porque en mi cabeza es como que lo venía jugando hace un año. No voy a mentir diciendo que no tenía nervios, pero durante el viaje a Madrid me propuse dejar de lado toda la admiración que sentía por los jugadores consagrados y ponerme mentalmente de igual a igual para poder cumplir bien mi rol en los descansos de Pablo (Prigioni)”, indicó el actual base de Comunicaciones de Mercedes.

Estar en un mismo plantel con Scola, Nocioni, Delfino, Oberto, Prigioni no es para cualquiera, no es una situación fácil de llevar por lo que marcaron estos nombres en la historia del básquetbol argentino y por eso que romper el hielo y sacarse las ganas entrenando y corriendo era la forma en que Junior podía sentirse a gusto y para ello encontró en Leo Gutiérrez, excompañero en Boca, el hombre ideal: “Nunca había entrenado con los de la Generación Dorada a Pablo, Fabricio, Luis, el Chapu, Carlos no los conocía y por eso que me sirvió muchísimo que dentro de ese grupo este Leo Gutiérrez, con quien fui compañero en Boca. Me ayudó muchísimo, desde el primer día que llegué me metió bajo el brazo y me hizo todo mucho más fácil el día a día”

Si hay algo que es sagrado para Luis Scola son las horas de entrenamientos y entre estas los pre y los post de cada uno de ellos para ajustar detalles individuales y eso fue ideal Cequeira  para ganarse la confianza del gran capitán: “La verdad que lo de Luis fue lo que más me sorprendió, ya me habían dicho que siempre él iba una hora antes y en mi caso como que me tenía que sacar la ansiedad y conocerlo más iba con él para tomar tiros e ir ganando confianza. En ese mundial hubo un grupo bárbaro que me recibió de la mejor manera y me hizo sentir cómodo tanto dentro como fuera de la cancha”

En Turquía 2010, Argentina tuvo una destacada actuación no tan valorada por todos los logros previos que se habían conseguido, pero el quinto puesto con una victoria épica ante Brasil y cierres con éxitos antes dos grandes europeos como Rusia y España, no son cuestiones para despreciar.

“El quinto puesto fue una gran satisfacción para todos. Después de perder con Lituania, la mentalidad de los grandes hizo que nos enfoquemos esa misma noche en un mini torneo por el quinto lugar. Lo conseguimos derrotando a dos grandes selecciones como Rusia y España y por eso que nos sentimos orgullosos de lo que se logró”, enfatizó Junior.

Sobre la cuestión de si se puso a analizar que fue parte de un proceso que involucró a muchos de la Generación Dorada, siendo esto un recuerdo para el resto de su vida, el base chaqueño admite que aún no ha tomado tanta conciencia de lo que le tocó vivir en esa Copa del Mundo: “No tomo dimensión aún, creo que lo voy a hacer cuando deje de jugar, al estar compitiendo no te pones a pensar en lo que viviste o cosas lindas que te pasaron en la carrera. Siempre estamos metidos en nuevos objetivos, pero si es algo que voy a valorar mucho más con el paso del tiempo”.

 La tremenda confianza interna de Junior Cequeira le permitió estar listo para aportar su granito de arena y gracias a esto, el día de mañana podrá contarles a sus hijos o a sus nietos  que cumplió su sueño, jugó una Copa de la Mundo con la Selección Argentina, un privilegio de pocos y el deseo de muchos.

Mauro Osores / [email protected]

En Twitter: @basquetplus

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