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Es muy creído que Magic Johnson y Larry Bird fueron los responsables de popularizar la NBA a nivel nacional, y con razón. La legendaria rivalidad entre Los Angeles Lakers y Boston Celtics fue el factor que dio a conocer la Liga a millones de personas. En cuanto a Michael Jordan, se le atribuye haber llevado la NBA a nivel global.

Gracias a su impresionante juego, Jordan llevó a Chicago Bulls a la victoria en los campeonatos de 1991 y 1992. Ya en ese momento, había asegurado patrocinios de empresas como McDonald's y Gatorade, y su exitosa línea de zapatillas, Jordan Brand, se distribuía por todo el mundo.

No obstante, lo que verdaderamente dio a conocer la NBA al mundo fue la participación de Jordan en el Dream Team de 1992 en los Juegos Olímpicos de Barcelona. Aunque Charles Barkley fue el máximo anotador del equipo olímpico, Jordan se convirtió en el centro de atención.

El Dream Team de 1992 fue quizás el equipo más fuerte jamás reunido. Aunque LeBron James cree que el ‘Redeem Team’ de 2008 podría haber superado al Dream Team, lo cierto es que la plantilla de los Juegos Olímpicos de 1992 es realmente única.

En una entrevista de 1992, Michael Jordan respondió acerca de la importancia de una medalla olímpica. Como era la primera vez que se permitía a los jugadores de la lNBA participar en los Juegos Olímpicos, estaba claro que MJ valoraba enormemente el oro en Barcelona.

"El título de la NBA es para Chicago y los aficionados de los Bulls de todo Estados Unidos, pero los Juegos Olímpicos son para todo el mundo", declaró el cinco veces MVP.

Antes de esto, Jordan explicó por qué Magic Johnson había vuelto tras el anuncio de su infección por VIH hace menos de un año. "Logró todo excepto una cosa: nunca jugó en unos Juegos Olímpicos. Nunca ganó esa medalla de oro. Y eso podía estar carcomiéndole".

El dominoo del Dream Team fue claro durante toda la Olimpiada. En cuartos de final y semifinales, vencieron a Puerto Rico y Lituania por un total combinado de 87 puntos, para luego pasar a la final, donde derrotaron a Toni Kukoc y Croacia por 117-85, obteniendo la medalla de oro que, según Jordan, fue un título sin igual.