Basquetplus.com

La NBA no deja de sorprender como organización y está siempre a la vanguardia de todo y en esta última semana se despachó con un vídeo institucional de gran calibre, mostrando a las leyendas de ayer y las estrellas de hoy en una especie de paseo con un bus escolar. Si bien faltaron varios nombres de los importantes como el de Michael Jordan, el dinamismo y los detalles hicieron del NBA Lane un producto notable y entre los muchos protagonistas que dieron el presente, Manu Ginóbili estuvo allí, preparando un asado para sus vecinos y luego tirando un tremendo Alley Oop a Zach LaVine, la figura actual de Chicago Bulls.

Pero como la NBA es un producto que se consume desde hace mucho tiempo y puede que un fan de la vieja escuela haya quedado encantando con el video viendo a Manu, quizás haya preguntado en su grupo de whatsapp “¿Quién es al que le da el pase Manu?” y a raíz de esto van cinco cuestiones relevantes de la carrera de Zach LaVine.

Zachary LaVine nació el 10 de marzo de 1995, unos meses antes de que Manu haga su debut en la Liga Nacional jugando para Andino de La Rioja (29 de septiembre ante Peñarol de Mar del Plata) y tuvo una infancia primero ligada al béisbol y luego a baloncesto por culpa de Space Jam, la película de Michael Jordan.

Después de su etapa en el high school, Zach decide ser parte de la prestigiosa Universidad de UCLA y tener allí su paso previo a la NBA. Su estadía en la universidad principal de California fue de solo un año, dado que en el verano del 2014, previo a su segunda temporada, decidió poner su nombre en el draft y Minnesota lo reclutó en el puesto 13. Hace poco circuló un vídeo del momento de su elección y se reacción generando la duda de que si su insulto fue una especie de desahogo por ser parte de la NBA o porque los Wolves hayan adquirido su derechos.

 

 

 

 

View this post on Instagram

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Una publicación compartida de Exclusive Content (@shootinguards)

Ganó dos veces el concurso de volcadas en el All Star Game y uno de ellos fue el del 2016, de los mejores que tuvo la NBA en mucho tiempo con un contienda mano a mano con Aaron Gordon. Mucho se habló de la volcada en el que ex Magic hizo casi sentado sobre el aro, pero las de LaVine en ningún momento se quedaron atrás con saltos desde la línea de libres y paso entre las piernas incluido. Fue polémico, pero LaVine se quedó con ese ya histórico Slam Dunk Contest.

A pesar de ser una estrella en ascenso, los Wolves decidieron no esperar por él y lo mandaron a Chicago a cambio de Jimmy Butler junto con Lauri Markkanen. Un trueque que no funcionó para Minnesota, ya que  el ex Bulls pidió el traspaso en el verano siguiente, amenazando de que no si no lo hacían en ese momento, a final de temporada se iba como agente libre sin recibir nada a cambio.

En este verano y tras una buena temporada individual, La Vine fue convocado por Popovich para ser miembro del seleccionado de Estados Unidos en los Juegos Olímpicos de Tokio. Allí consiguió la medalla dorada y un dato por demás curioso, es que en el torneo olímpico el combinado estadounidense ganó cinco juegos en fila, un hecho relevante para LaVine ya que no conseguía ser parte de una racha positiva colectiva desde el 2013 cuando jugaba para UCLA. En sus siete temporadas en la NBA, nunca había ganado más de cuatro juegos consecutivos y claro está que aún espera llegar por primera vez a una postemporada.

En el último dato que se puede mencionar de este gran jugador, el nombre de Facundo Campazzo se roba la escena. El base cordobés tuvo un gran partido ante los Bulls y dejó su marca registrada en aquel encuentro siendo el motor de la levantada de Denver en base a su intensidad defensiva. Facundo le robó un balón a LaVine en la mitad de la cancha que sirvió para darle vida a su equipo, siendo quizás el primer mojón del ex Real Madrid en la NBA, quitándole la pelota a uno de los valores jóvenes que tiene la liga.

Bien ganado tiene su lugar en el comercial Zach LaVine y seguramente deberá estar más que orgulloso que en su parte del vídeo compartió escena con Manu Ginóbili, candidato firme a ser uno de los mejores 75 jugadores de la historia, lo que le dará aún más valor a la participación del ex Wolves, quien contará en un futuro que estuvo en el NBA Lane y Manu, la leyenda de Bahía Blanca, le tiró una asistencia además de cocinarle un rico asadito.