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Los actos performativos consisten en formas de habla autorizada y la mayoría de ellos son afirmaciones que en la misma enunciación realizan una acción que ejerce un poder. Los declaro marido y mujer, se levanta la sesión, algunos ejemplos frecuentes.

Quien también con regularidad comunica esta clase de actos en el mundo de la naranja es Néstor Garcia, que será el reemplazante de Sergio Hernández en el puesto de entrenador en jefe del seleccionado argentino masculino.

Decir para él es hacer y la comunicación con el jugador jamás hace ruido. Actuar desde el convencimiento, la verborragia y una personalidad que absorbe la presión son algunas de sus credenciales y su estilo conlleva algo similar.

Construir desde la agresividad defensiva es nodal en cualquiera de sus equipos y numerosos son los ejemplos visuales y estadísticos que lo avalan.

De todos ellos, hay dos casos que describen al Che García en la cancha y se produjeron en el Mundial de China 2019 con República Dominicana y luego con San Lorenzo en la temporada 2019/20, cuando le tocó reemplazar a Facundo Muller.

En ambas situaciones lo que se realizó atrás provocó alegrías adelante y su edificación consiste en marcar habitualmente seguidor en todas las cortinas, fondo en los codos (el defensor primario se para de costado y orienta al portador hacia ese lado mientras el que está con el que pone el pick se hunde) y sobrecarga en la pintura con dos o tres (o más) basquetbolistas para evitar puntos fáciles.

En estas dos jugadas se ve un poco de eso. Primero en República Dominicana llegando a puntear los dos tiros para luego atrapar a Danilo Barthel en la llave y provocar el robo, y después ajustando la penetración de Mariani con cuatro del Azulgrana metiéndose en la zona pintada con celeridad. 

Tal es su dominio atrás que desde su llegada al Ciclón el experimentado entrenador modificó el funcionamiento colectivo y, al momento de la suspensión por la pandemia del Covid, San Lorenzo era el equipo con el rating defensivo (puntos permitidos cada 100 posesiones) más bajo de la competencia con 101,9.

Por otro lado, ofensivamente es un técnico que sabe adaptarse a su personal, siempre con la primicia de anotar en transición, el reparto coherente del goleo y, en última instancia, si no se puede correr, el uso de cortinas en el eje y los codos para los portadores de balón.

Tanto en Dominicana como en San Lorenzo la distribución de los puntos fue pronunciada. Los del Mundial solo tuvieron dos jugadores anotando por encima de los diez puntos (Víctor Liz con 13,0 y Eloy Vargas con 11,0) y cinco por arriba de los cinco, y en la Liga Nacional se combinaron entre Tucker, González, Vildoza, Aguirre y Mata para anotar el 58% del total (87,5 tantos por encuentro).

Fuente: Real GM

Nuevamente se pueden ver las similitudes entre Dominicana y San Lorenzo. En la primera acción es Williams quien cortina al Penka y luego realiza la caída en conjunto con su compañero, que llega al aro con la flotadora. En las otras dos jugadas algo similar con Liz y Solano con el balón tras recibir picks en los codos y el eje. 

Después de esos excelentes torneos García estuvo dirigiendo en Taurinos de Venezuela y Cangrejeros de Puerto Rico, pero los resultados no lo acompañaron.

En 16 encuentros de la temporada actual, Cangrejeros perdió en nueve ocasiones al momento de su salida, aunque, según el comunicado oficial de la institución, la salida del bahiense se debió a futuros compromisos personales y profesionales, por lo que el estado deportivo del club y de la filosofía del coach serían secundarios en ese sentido.

Con esto dicho, el estilo de juego del Che se adapta a la idea que viene aplicando Sergio Hernández en Argentina. Defender la primera línea de forma agresiva, compensar la falta de altura sobrecargando la pintura y protegiendo el rebote, buscar anotar con celeridad en transición y, si no se puede, generar desde la creación de sus activos.

Como todos los caminos llevaban a Roma, la mayoría de los senderos se dirigen a García. ¿Será Argentina su próxima osadía? Un aplauso y la agresividad como bandera son sus únicas vías para no borrarse de las internacionales guías. 

Ignacio Miranda/ [email protected]
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