El futuro de Luis Scola se ha convertido en uno de los enigmas más importantes a resolver. Se sabe que el capitán argentino se encuentra tranquilo y que, si bien cree que su retiro no está lejos, confirmó que la próxima temporada seguirá jugando. No se sabe dónde lo hará, algo que dependerá del proyecto al que le ofrezcan sumarse para ver si lo seducen. Por lo pronto, hoy estuvo en Vitoria para celebrar y recordar el doblete del Baskonia en la 2001/02, y en diálogo con EFE dejó algunos conceptos interesantes.
Aprovechando el clima tan mágico que se creó esta tarde en el Buesa, Scola señaló que quiere "evitar jugar en Europa con otra camiseta que no sea del Baskonia". ¿Un pendiente? Según indicó y a pesar de todos los logros que posee dentro de su carrera, el ala pivote nacional confesó que le hubiese gustado "ganar un Final Four de la Euroliga". De todas formas al parecer no tiene nada descartado, recordando que ya dijo que jugar en la NBA se ha vuelto difícil además de una cuestión de mover a su familia por 5-6 meses que pone trabas en sus chances de seguir en la liga estadounidense.
Si bien el Baskonia parece ser la opción europea que más lo tentaría esto no sería nada definitivo de momento, ya que también podría barajar otras alternativas como la liga china. "Las ligas cortas tienen más sentido y, por este motivo, la liga de China es una ventaja".
"Es difícil volver a Argentina a jugar porque me atrae menos esa liga y aunque no tengo rechazo, estoy pensando en otra cosa", añadió Scola, quien ha considerado que su cuerpo está "bien físicamente" y quiere estar en un lugar que le motive. "La mente y el cuerpo tienen que estar en sintonía porque cualquier proyecto es exigente ya que hay aficionados, hay prensa, hay objetivos, hay un dueño, hay compañeros y hay rivales".
"Lo más probable es que no me retire este año, pero tampoco pienso que falte mucho porque tengo 37 años", analizó Scola, que también tuvo palabras para referirse a su tiempo en la selección argentina. "En la medida en que esté jugando estaré en la selección. No busco terminar en una Olimpiada, no busco una despedida especial", aunque ha admitido que no va a haber "diferencia" en si está él o no.
En referencia al relevo generacional que está viviendo el combinado nacional, ha avisado de que poner el listón en el oro olímpico "sería ponerlos en una situación casi de fracaso asegurado porque es muy difícil conseguirlo", pero ha presagiado que tienen "posibilidades de éxito y de volver a estar en ese grupo de cuatro o cinco de países importantes".
Cuestionado por su futuro después de que deje de ser jugador profesional, Luifa ha señalado que no cree que corte "de raíz" su vínculo con el básquet, pero ha asegurado que tampoco se ve "como entrenador".