Santander: "Hubo mucho corazón para darlo vuelta"
16:21 14/08/2015 | Hablamos con Cristian Santander, entrenador de la selección femenina, sobre todo lo que dejó el histórico triunfo ante su par brasileño.
Sin dudas que lo conseguido en la madrugada de este viernes quedará para la historia. En lo que fue un éxito trascendental al ganarle a Brasil después de 59 años, la selección argentina femenina quebró con uno de los maleficios más importantes de la historia del género y sigue a paso gigantesco en el Preolímpico de Edmonton 2015. El partido no definía más que las posiciones finales del grupo porque ambos ya estaban clasificados a semifinales, sin embargo el encuentro quedará grabado en la memoria de todos al conseguir semejante proeza.
Por estas horas se vive un clima de mucho regocijo en Argentina después del triunfazo de anoche. El seleccionado albiceleste no le ganaba al clásico rival desde el Sudamericano de 1956, cuando en esa ocasión se impuso por 62-57 en fase de grupos. Casi sesenta años después, en el presente FIBA Américas que ilusiona a todos con conseguir un boleto rumbo a Río 2016, Argentina dejó su sello como aquella vez y se impuso por 73-69.
En Mayores hubo otras victorias contra Brasil en el medio pero nunca fueron por torneos oficiales. Sin ir más lejos, el último éxito ante las brasileñas en partidos amistosos no quedó tan distante si recordamos que las Gigantes se llevaron una fantástica victoria en un fogueo jugado en General Alvear en la previa al Sudamericano 2013 de Mendoza. Muchos recuerdos, muchas anécdotas, pero sin dudas que la gesta que consiguió Argentina en este Preolímpico tendrá una marca importantísima para la historia.
Por esa razón, con las Gigantes ya metidas en semifinales y esperando el duelo que tendrán mañana ante Cuba (18:30 horas), Básquet Plus aprovechó la presente jornada libre de partidos y habló de este enorme suceso con Cristian Santander. El entrenador del seleccionado nacional no solamente se refirió a la enorme trascendencia de este logro ante Brasil, sino que también analizó lo que se avecina en el horizonte del elenco argentino.
- Imagino que la forma en la que han vivido todo esto es algo que está fuera de cualquier idea que pueda hacerme.
. Y sí, la verdad es que hicimos un esfuerzo muy grande, creo que merecíamos poder ganar si se hubiese dado el caso de que lo hayamos perdido. La verdad es que hubo mucho sufrimiento al final porque parecía que se repetía la historia, de que jugábamos como nunca pero lo perdíamos como siempre. Por suerte se pudo dar vuelta, aguantar la tormenta y cerrar bien.
- ¿Cómo fue ese momento donde ven que Brasil se les vino encima con toda la historia de fondo?
. Es cierto pero no lo pensamos a eso, lo único que nos importaba y pensábamos en ese momento era ganar. Sabíamos que la diferencia inicial era exagerada, porque no hay una distancia de 16 o 18 puntos contra ellos, entonces iba a ser difícil de sostener. En el primer tiempo habíamos tenido un muy buen momento nuestro y el de ellos fue malo, se encontraron esos dos polos tan opuestos del juego pero yo sabía que no era algo real porque eso se iba a achicar. Cuando ellos pasaron al frente fue el momento de mayor dudas en el equipo porque fue faltando cuatro o cinco minutos, por lo que quedaba volver a tomar la senda del juego en ese poco tiempo. La verdad es que fue un pasaje muy difícil, pero hubo mucho corazón para poder darlo vuelta.
- Hubo un tiempo muerto donde animaste la reacción del equipo pasando por un lapso jodido, con un llamado de atención. Pero independientemente de eso me pregunto dónde fue que encontraste la calma para analizarlo, porque debe ser algo difícil.
. Sí, es muy difícil, la verdad que muchísimo. A mí lo único que no me gustó de ese momento fue que hubo tres minutos donde dejamos de ser un equipo para pasar a jugar de forma muy individual, creo que fueron los únicos tres minutos de todo el torneo donde jugamos así. Eso nos llevó a apresurarnos y no tomar buenas decisiones, por eso fue mi preocupación. Decidí pedir minuto para cortar eso porque necesitábamos volver a ser un equipo que se pase la bola y que pueda seleccionar bien los tiros, después si entraba o no ya era otra cosa, pero me interesaba eso. Por suerte se pudo, y en la medida que también se pudo se logró mantener la calma.
- ¿En tu cabeza cuándo das por cerrado el partido? ¿En el momento donde suena el final o ese triple de Andrea (Boquete) te marcó el camino?
. Hoy la valoración está puesta en el triple de Andrea que sin dudas fue muy importante, pero lo otro que también fue muy importante para nosotros es haber llegado a esa instancia del juego con solo dos faltas colectivas. Entonces, cuando hace el triple Andrea yo me veo ganador porque nos quedaban dos faltas para dar con 13 segundos y eso era bueno. Había que tratar de administrar bien esos segundos y que el tiempo pase todo lo que pudiera. Después también tenía que meter los libres Macarena (Rosset), porque sino quedaban algunas dudas en el final. Pero sinceramente luego del triple de Andrea y con dos faltas para dar sentí que ganamos.
- No sé si realmente lo planificaste tan así en la lectura previa del partido, ¿Pero te imaginaste ese rendimiento tan elevado en defensa que tuvieron por muchísimos momentos? Porque se vienen a la cabeza trabajos tremendos que hicieron tanto Gisela (Vega) como Celia (Fiorotto), momentos de Andrea, Ornella (Santana), Melisa (Gretter)...
. Algunos rendimientos obviamente que están escapados de la media para arriba, y eso ayuda a todo el funcionamiento del equipo. Lo que imaginamos nosotros es lo que imaginamos siempre antes de un partido: terminando ganando (risas). Obviamente también priorizamos cómo poder ganar, la forma en la que lo hacemos, porque la verdad es que este tipo de partidos no se gana solamente con el deseo de ganar y hay que trabajar y hacer cosas para que eso ocurra. Creo que la determinación defensiva de las chicas fue la clave y el mérito simplemente es de ellas.
- ¿Qué sensaciones te invadieron cuando se terminó?
. Son muy difíciles de describir. No hay nada más lindo que ver a un argentino ganando, pero también con la tranquilidad de que todavía no se terminó y de que hay que seguir jugando. Lo de ayer solo lo que podía hacer era cambiar puestos y ahora ya estamos pensando en lo más importante.
- ¿Se pudo festejar bastante o fue algo muy rápido?
. No, yo tengo muy en claro que el éxito solo dura 5 minutos y ese tiempo ya pasó, ya está. Hay pensar en lo que sigue y no dormirse. En cuanto al tiempo yo disfruto mucho menos de ganar que de lo que sufro cuando pierdo, no seré un parámetro para eso pero ya estamos pensando en Cuba.
- Está claro que siempre van a salir a ganar. Es un clásico, el rival de siempre y esa lucha contra la historia, ¿Pero en la antesala te veías muy complicado un hipotético cruce en semis con Canadá?
. Y... la verdad es que ellas están en un momento muy bueno. No sé si ponerte algún tipo de ranking pero hoy están a primer nivel mundial, están muy fuertes, con muchas variantes, estatura y es el equipo más completo. Pero también sabemos que en instancias decisivas no son el mismo equipo que en fase regular. De todas formas nosotros no pensamos más allá del cruce que teníamos, no mirábamos más adelante de lo que era jugar con Brasil y que después venga quien venga. Esa era la idea, jugar contra Brasil y tratar de romper la historia.
- Igual lo analizaba desde el lado de la forma en la que Canadá le ganó a Cuba, porque lo borró de la cancha muy rápido y hasta eso pudo haber agrandado su imagen pensando en semis.
. Sin dudas que el partido de Canadá fue tremendo, humilló a Cuba que es el último campeón de un FIBA Américas y lo borró, en una superioridad que no es normal. Por eso te decía que está bueno que Canadá juegue sus mejores partidos en fase regular, porque ahora hay que jugar por la parte más importante del torneo.
- No lo creo pero, pensando en la semi de mañana con Cuba, ¿Puede incidir en algo la paliza que recibió a manos de Canadá?
. No, yo creo que no, porque todos dan vuelta la página hayan perdido o ganado. Son todos equipos que tienen muchas instancias decisivas, saben jugar estos momentos y en un momento tan corto nadie puede pensar que después ganar un partido ya está todo dicho. Su experiencia y su andar en instancias decisivas lo va a hacer dar vuelta la página rápido.
- Y además teniendo un día bisagra como hoy.
. Tal cual. Después de haberlo jugado, te digo que a nosotros el tema del fixture y los cuatro partidos consecutivos fue lo mejor que nos pudo haber pasado para que no nos cortasen una racha. Distinto podría haber sido si nos tocaban dos partidos, un descanso y los otros dos partidos. Pero te lo digo hoy que nos pasó esto, sino nos pasaba esto te hubiese dicho que los cuatro partidos seguidos nos mataban (risas). Este día libre tenemos que aprovecharlo, mañana hay que estar bien preparados.
- ¿Se mira de reojo lo que vaya a hacer Brasil contra Canadá?
. Sinceramente no porque nosotros vamos primeros y después juegan ellos, así que nosotros tenemos que pensar solamente en nosotros. Después sí seremos todos hinchas de Brasil, pero hoy solo pensamos en nosotros porque si nosotros no pasamos no tiene importancia ese partido. La prioridad es poner la cabeza solo en Cuba y ganar, si se logra después ya habrá tiempo para que ojalá Brasil haga lo propio. No hay que tratar de hacer demasiadas cuentas. Se especulaba mucho con que a nosotros nos convenía perder anoche porque después el cruce con Canadá a un partido y con la opción clara de que Brasil le pueda ganar a Cuba podíamos estar junto con Brasil directamente en Río, pero la verdad es que de esas especulaciones no hay que tomarse y hay que jugar cada partido. Más aún cuando enfrente tenés la calidad y la jerarquía de estos rivales.
- ¿Haberle hecho un muy buen partido a Canadá en Toronto sirve de algo en este momento o es algo totalmente intrascendente?
. No, de algo sirve sí, es un torneo totalmente distinto pero de algo sirve y como antecedente está. Hoy estamos en otro momento, sobre todo en la suma de convivencia y de trabajos que pudimos hacer con respecto a Toronto porque recordemos que ese fue el segundo partido juntos. Creo que sirve como antecedente, pero es otro torneo y hay que jugar día a día.
- Retomo esto histórico con Brasil para ir más al fondo de la cuestión, la llegada que tuvo este hecho histórico ya sea en las redes sociales o medios de comunicación. ¿Hay consciencia de esto que han logrado?
. Sí, somos conscientes de lo que pasó. A mí me gusta que la oportunidad que tiene el básquet femenino de estar en los medios sea por haberle ganado a Brasil y no por otro tipo de noticias, eso me gusta mucho y es algo que está bueno. Me gusta que se valoren los rendimientos individuales de ayer y las facetas de equipo que hemos tenido. Después sí somos conscientes del lugar donde estamos porque la verdad es que acá hay chicas jugadoras que han trabajado muchos años para esto y es lindo que alguna vez se pueda dar. Mentiríamos si dijéramos que esto es obra de la casualidad y que es algo que no iba a pasar nunca, porque la verdad es que nosotros trabajamos para que alguna vez se dé. Las chicas trabajan, entrenan, estudian, hay muchos años de esfuerzo para que algún día nos toque a nosotros.
- Pienso que es un triunfo que está ligado no solo a estas doce jugadoras y el cuerpo técnico, sino a todo el reciente proceso e incluso los anteriores, porque es algo que desde muchísimos años se ha buscado.
. Es un éxito de todos los que estamos acá, de las chicas que estuvieron como parte de la preselección, de las dos Sofías (Castillo y Aispurúa), de Nacha (Pérez), de Nadia (Flores), de Fernanda (Melo)... de muchas chicas que han estado, que han apoyado este proceso y no les tocó quedar. También es un éxito de toda la gente que hace básquet femenino en Argentina, de los años de Eduardo (Pinto), de Roberto (Santín) en las selecciones. Esto es un éxito de todos, apropiarse de un triunfo como este estaría mal porque creo que es un trabajo de muchos años en las selecciones argentinas.