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Pau Gasol era un prometedor estudiante de medicina antes de que despegara su carrera deportiva. El interés de Pau por la medicina surgió cuando apenas tenía 11 años. Para empezar, estaba rodeado de profesionales médicos, ya que su madre era médica y su padre, administrador de enfermería.

Aún así, no fue hasta que sus intereses deportivos y médicos chocaron que decidió seguir los pasos de su familia. En 1991, el jugador favorito de Gasol, Magic Johnson, anunció que era seropositivo, y eso tuvo un gran impacto en el joven Gasol. Impulsado por el deseo de ayudar potencialmente a su ídolo, Gasol decidió en ese momento que iba a dedicarse a la medicina. Hubo solo un problema: a medida que Gasol crecía, se convirtió en un jugador increíble.

A los 16 años, comenzó a jugar en el equipo juvenil del FC Barcelona y ayudó a la selección española Sub-18 a ganar el Campeonato FIBA de Europa Sub-18 y el prestigioso Torneo Albert Schweitzer. A los 18 años, Gasol se graduó como jugador oficial del FC Barcelona, pero siguió el camino médico que se había trazado siete años antes.

Y así, mientras aún jugaba como profesional, se matriculó en el prestigioso programa de la facultad de medicina de la Universidad de Barcelona. Eventualmente, se hizo imposible seguir viviendo dos vidas exigentes, y después de unos años, Gasol tomó la difícil decisión de ingresar al Draft de la NBA. Es difícil discutir con su elección, ya que ganó el premio al Novato del Año tras ser elegido número 3 en el Draft de 2001.

Pero aunque Gasol estaba viviendo su sueño en la NBA, nunca perdió de vista su pasión por la medicina. Mientras estuvo en Memphis, se convirtió en embajador de UNICEF y trabajó con el St. Jude Children's Research Hospital. Luego, tras unirse a los Lakers, Gasol continuó esta noble labor con el Children’s Hospital Los Angeles, visitando a los niños del hospital con frecuencia.

Según se informa, Gasol estaba tan avanzado que algunos médicos lo trataban “como un colega quirúrgico” a modo de chiste. Si bien es cierto que Pau nunca fue un médico oficial, ha hecho más méritos dentro de la materia de lo que nadie podría haber esperado en un futuro Salón de la Fama de la NBA.