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Incluso durante su temporada de despedida de la NBA, Kobe Bryant fue exigente con sus compañeros, esperando siempre lo mejor de ellos. Según develó Lou Williams, quien jugó junto a Kobe en su último año en la liga, Bryant no dudaba en exponer y amenazar al resto del vestuario, especialmente a los jóvenes.

"Era duro con esos chicos jóvenes. Solo con los jóvenes. Eran a quien debía hacer crecer", reveló Williams en su participación en el Podcast P con Paul George. "Solo recuerdo que les decía a los jóvenes, 'Cuando esté en la oficina principal el próximo año, los voy a traspasar a todos' dijo en medio de una práctica", apuntó el tres veces Sexto Hombre del Año.

Kobe estaba decepcionado con el rendimiento de los jugadores jóvenes, ya que los Lakers solo ganaron 17 juegos esa temporada. Estaban rankeados en el penúltimo lugar en ofensiva y en el último lugar en defensa. Bryant sabía que la temporada de despedida se trataba de celebrar su carrera. Sin embargo, todavía odiaba el hecho de que todos los equipos los estuvieran vapuleando en cada juego.

En un momento de la temporada, Williams reveló que los Lakers eran tan malos que Bryant pidió al encargado del equipo que retirara sus zapatillas de los armarios de todos. "Regresamos a Los Angeles al día siguiente, y el utilero del equipo estaba dando la vuelta con un cubo grande recogiendo las ‘Kobes’ de todos los armarios. Él decía, 'Kobe piensa que son unos blandos, no quiere que lleven su marca personal'", agregó Williams.

Aunque Kobe podría haber estado sonriendo y celebrando su carrera con el público durante la mayor parte de su gira de despedida, eso no significaba que se lo tomara con liviandad con sus compañeros. Bryant todavía quería ganar, pero desafortunadamente, su equipo no podía estar a la altura de su mentalidad.