A 20 años del Oro olímpico

La Generación que puso a la Argentina en boca de la NBA

08:45 19/07/2024 | Estados Unidos fue vencida dos veces en los tempranos 2000 y así las figuras de la mejor Liga del Mundo reconocieron una y otra vez la grandeza albiceleste.

LeBron James ante Manu en el Mundial 2006 (Getty)

En 2002, la historia del baloncesto mundial cambió para siempre. En el Mundial de Indianápolis, la selección argentina se enfrentó al invicto equipo estadounidense, compuesto íntegramente por jugadores de la NBA, y lo derrotó por 87-80. Esta victoria, liderada por un sobresaliente Emanuel Ginóbili, Luis Scola y Andrés Nocioni, fue un hito que rompió la imbatibilidad del 'Dream Team' en competiciones internacionales desde 1992.

Tras esa primera gran sorpresa de Argentina materializada en la Copa del Mundo de 2002 . "Estábamos más en sintonía con Europa, quizá con Italia, Rusia y Yugoslavia. ¿Pero Argentina? No tenía ni idea de ellos. ¡Argentina es fútbol!", recordó el exentrenador de Estados Unidos, Larry Brown.

La derrota de Estados Unidos no solo fue un golpe para su orgullo, sino también una llamada de atención sobre el creciente nivel del baloncesto internacional. "Nos sorprendieron en la primera parte", reconoció Paul Pierce, uno de los jugadores más talentosos del equipo estadounidense en ese torneo de Indianápolis. "Me quito el sombrero porque salieron al campo a jugar un gran baloncesto".

''Si perdemos uno solo, aunque ganemos el oro, nuestros compañeros en la NBA no nos mirarían más a la cara'', era lo que había dicho la estrella de Boston Celtics en la previa al partido de 2002. La previa de algo nunca sucedido, una derrota del equipo estadounidense armado con jugadores NBA.

Dos años después, en las semifinales de los Juegos Olímpicos de Atenas 2004, Argentina volvió a derrotar a Estados Unidos, esta vez por 89-81, consolidando su estatus como una potencia del baloncesto. Manu Ginóbili, nuevamente, fue la estrella del partido con 29 puntos. Allen Iverson, uno de los líderes del equipo estadounidense, admitió: "Luchamos tan fuerte como pudimos. No pudimos hacerlo por cualquier razón. Fueron un mejor equipo que nosotros".

La victoria argentina no solo fue una hazaña deportiva, sino también un testimonio de la química y el trabajo en equipo de la Generación Dorada. LeBron James, Dwyane Wade y Carmelo Anthony, en el documental de Netflix "The Redeem Team", elogiaron la cohesión y camaradería de los jugadores argentinos. "Tenían química, trabajaban en equipo. Había camaradería. Dejaban todo en la cancha. O sea, ellos jugaban al baloncesto como se debe", exclamó LeBron James.

Carlos Boozer también destacó el entendimiento entre los jugadores argentinos: "Se notaba que hace muchos años que jugaban juntos", y Dwyane Wade agregó: "Enseguida te dabas cuenta de que tenían química. Pasaban el balón y sabían donde estaba el otro. Fue feo de ver. Fue terrible de ver y ser parte de eso".

Incluso en la derrota, los jugadores estadounidenses reconocieron la grandeza de la Generación Dorada. "Estaban más conectados, tenían jugadas preparadas", mencionó Carmelo Anthony.

La influencia de la Generación Dorada argentina sigue siendo recordada y respetada en la NBA. Jugadores como Manu Ginóbili, Luis Scola y Andrés Nocioni no solo dejaron una marca en el baloncesto internacional, sino que también cambiaron la percepción del baloncesto argentino en la NBA. Su legado es una inspiración para futuras generaciones y un recordatorio de que el baloncesto es un juego de equipo, donde la química y la dedicación pueden superar incluso a los más talentosos.

Carmelo Anthony, el único miembro del equipo de 2004 que estuvo en el roster de Estados Unidos en los Juegos Olímpicos de Río 2016, también mostró su aprecio por la Generación Dorada después de su último torneo: "Les dije, gracias", dijo Anthony, reconociendo la influencia y el impacto que tuvieron en el baloncesto internacional.

La Generación Dorada no solo dejó una marca imborrable en el baloncesto mundial, sino que también ganó el respeto y la admiración de las estrellas de la NBA. Sus victorias contra Estados Unidos en 2002 y 2004 son un testimonio de su talento, dedicación y espíritu de equipo.

 

 

Pablo Catalá / [email protected] 
En Twitter@basquetplus 

 

Fuente: 
Olympics.com

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