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Andrew Wiggins viene de la mejor temporada de su carrera, impactando en ambos costados con Golden State, con el anillo de campeón y llegando a ser titular del All Star. Sin embargo, reveló que sus primeros años no fueron fáciles luego de ser el 1 del draft.

Apodado el próximo LeBron, esa presión lo afectó y Wiggins lo sufrió, como expresó en el podcast Point Forward, de Andre Iguodala y Evan Turner: “Definitivamente hubo presión, especialmente siendo de Canadá, sabiendo que toda la ciudad estaba mirando. Todo el país está mirando. Todo el país quiere que hagas el bien. Te están llamando el próximo LeBron, cosas así. Nadie va a ser el próximo LeBron. Ese es uno de uno”.

Efectivamente, el canadiense sufrió ese exceso de expectativas desde sus comienzos en Minnesota. Allí había llegado casualmente luego de un traspaso que llevó a Cleveland a Kevin Love. A partir de allí fueron cinco temporadas y media sin poder dar el paso de ser la gran figura que se esperaba.

Sin embargo todo fue un nuevo comienzo en 2020, cuando Golden State apostó por él y lo llevó a su equipo. Ya sin la presión de ser la principal arma ofensiva, Wiggins se amoldó a unos Warriors que tenían a figuras como Steph Curry o Klay Thompson. Y en los últimos playoffs, el alero explotó, fue una de las enormes figuras del campeón y dejó atrás todas las dudas que tenían en él.