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Aunque Mac McClung salvó el sábado por la noche no solo al Torneo de volcadas de la NBA sino probablemente a todo el All Star Weekend, la realidad es que el bueno de Mac es un jugador que desde que debutó en la NBA en la 2021/22 pasó por 4 equipos distintos y jugó 5 partidos en total, siendo su máximo 2 con Philadelphia en la 2022/23. Después anduvo básicamente por la G-League, donde actualmente está en la subsidiaria de Orlando Magic, Osceola. 

Todo bien con McClung y sus malabares, pero la realidad es que la NBA necesitaría algún nombre más importante en las volcadas, pero también es cierto que la última vez que ocurrió (Jaylen Brown el año pasado), fue un papelón. Los últimos jugadores probados en competir y hacerlo a alto nivel fueron Aaron Gordon y Zach Lavine, que protagonizaron duelos memorables, pero ya no. 

De hecho, si contamos jugadores All Star, para hacer una diferenciación, tomando ciclos de 5 años, Brown fue el único en estar en un Dunk Contest del 2021 para acá. El récord fue 9 entre 1986 y 1990 (Jordan, Wilkins, etc) y luego nunca más de 4. Por el contrario, cada vez más All Stars jugaron el torneo de triples, con récord de 26 del 2021 a esta parte. Tiene una clara razón: cuidar el físico más que la reputación, porque también ha habido contundentes fracasos. Como el propio Jordan, que en 1990 hizo 5 puntos sobre 30 posibles. 

Buddy Hield tiene una explicación razonable a por qué los mejores jugadores no participan: "La culpa la tiene internet. Hay muchísimos volcadores profesionales y los chicos los ven todo el tiempo en sus teléfonos. Hay que ser muy creativo para ganar y por eso creo que los dunkers de internet arruinaron el Torneo de volcadas". Si a eso le sumamos el riesgo físico, la combinación es letal. El sábado, tras el torneo ganado por McClung, Ja Morant tuiteó que eso lo motivaba a ir el año que viene. Veremos si cumple.