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El juego físico de Canadá sobre Eslovenia generó una gran cantidad de quejas de parte de los europeos. Todo esto terminó con Luka Doncic, la gran figura eslovena, expulsado del juego por doble falta técnica producto de sus quejas, algo habitual en los juegos.

“Todo el mundo sabe cuál fue mi frustración. Jugar para la selección nacional son muchas emociones. Muchas veces no me controlo, lo cual me provoca problemas. Uno de los árbitros le dijo a uno de nuestros muchachos ‘No le vamos a sancionar una falta porque viene hacia nosotros’” expresó en Conferencia de Prensa. Y agregó: “Creo que esto no es justo. Sé que me quejo mucho, pero no creo que sea justo. Han estado jugando físicamente conmigo, pero si dices eso, no es justo”.

A su vez, Zoran Dragic fue el otro que se quejó de la actuación de la terna: “Sabemos qué clase de hombre es Brooks: sucio. Su objetivo era provocarnos. Los árbitros no reaccionaron, lo cual me resulta extraño. Cuando nos pusimos en contacto con ellos, inmediatamente llamaron a todo, y cuando lo hicieron, no hubo ninguna llamada. Será interesante cómo jugarán contra Serbia”.

En este sentido habló de la situación de Doncic y lo defendió: “Luka estaba loco. Creo que también discutimos demasiado con los árbitros, pero fue muy difícil. Cuando te golpean constantemente, por un tiempo, quieres provocarte, como ellos, y luego te dan dos faltas técnicas al final y tienes que irte”.

Pero también fue autocrítico: “A pesar de todo, podríamos haber jugado un poco mejor. Jugamos a un nivel realmente alto durante los dos primeros cuartos, fuimos más allá de lo que hacían los árbitros. No todo es culpa suya”.