Basquetplus.com

Japón una vez más quedó a un paso de dar un golpe enorme. La derrota ante Francia en suplementario volvió a demostrar el crecimiento del básquet nipón y significó un paso más en el desarrollo del deporte en el país asiático. En este contexto, el mundo de los comics ha sido clave para ello, con Supercampeones en fútbol, Haikyu en vóley y Slam Dunk en básquet.

Realizada por Takehiko Inoue, Slam Dunk comenzó a aparecer en 1990 en un semanario llamado Shueisha, para luego convertirse en una serie animada. Este animé narra la vida de Hanamichi Sakuragi, un adolescente de gran tamaño que comenzó a jugar al básquet ya en el secundario para impresionar a una chica. A partir de allí arranca todo en el instituto Shohoku, donde el pelirrojo y otros cuatro jugadores se desarrollan con el objetivo de ser campeones nacionales. Con claras señales e inspiraciones por la NBA, también refleja el sistema basquetbolístico en secundarias y universidades de Japón, con un sistema similar al estadounidense.

Inoue explicó siempre que cuenta vidas reales de personajes, por lo que no es una historia de fantasía. “Creo que lo que más me gusta, con lo que me siento mejor, es con la realidad. No me siento cómodo con la ficción, es un género que no me gusta mucho” contó en una entrevista. El propio jugador es una historia real, dado que es un joven nacido en 1968 con una infancia complicada, que a los 12 años medía 1.75 y se destacaba por su fuerza y resistencia. Ya con 1.89 a los 17 años, fue figura de un amistoso de su universidad ante la selección japonesa con 33 puntos, ganándose el apodo de la “esperanza del básquet japonés”. Pero luego de eso sufrió un accidente y falleció con solo 18 años, por lo que Inoue creó la serie en su honor.

El comic tiene muchas referencias con la NBA de los 90, con los Bulls como grandes protagonistas, pero también en personajes como en los rivales de los Lakers, los Celtics y el Jazz, entre otros. A partir de esto, la masividad del básquet en Japón creció de enorme manera, ubicándose entre los animé más vendidos de la historia.

“Lo que quería reflejar en el manga es que cuando yo tenía esa edad y jugaba a baloncesto en el instituto, quería expresar los sentimientos que tenía en ese momento: la pérdida de un partido, jugar juntos en un equipo, ganar un partido, lograr metas y objetivos. Esto es lo que quería plasmar en el manga” contó.

Alejandro Malky / [email protected]
En Twitter: @basquetplus
En Twitter: @alemalky