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Facundo Campazzo, en su regreso al Real Madrid en 2023, eligió priorizar su deseo de jugar en el club blanco sobre la oportunidad de firmar el contrato más lucrativo en la historia del baloncesto europeo. El Panathinaikos de Grecia le ofreció 12 millones de euros netos por tres años, pero el cordobés prefirió aceptar un tercio de esa suma para unirse nuevamente al equipo español. "Quería jugar en Madrid", afirmó Giorgos Panou, su exrepresentante, en entrevista con Amerikanos24.

La decisión de Campazzo generó tensiones con su agencia de representación, Octagon, que abogaba por aceptar la oferta del equipo griego. Según Panou, la relación profesional terminó porque el jugador sintió que lo presionaban para ir a un lugar que no lo convencía. "Nuestro trabajo era traer la mejor oferta posible, pero él prefirió quedarse en el Madrid", explicó. Campazzo dejó en claro que su corazón estaba en la capital española, no en Atenas.

Sin embargo, el destino deportivo tuvo un giro amargo. En la temporada siguiente, Panathinaikos derrotó al Real Madrid en la final de la Euroliga. Panou no ocultó su satisfacción: "Que perdiera contra el Panathinaikos me dio una satisfacción extra, porque el proyecto griego tuvo éxito", dijo. El triunfo de los atenienses marcó un punto de inflexión, mostrando que el PAO sí tenía un plan ganador.

En su momento, Básquet Plus adelantó esta vuelta apasionada de Facu cambiando todo por volver a su casa. Actualmente, Campazzo sigue demostrando su valor en el Madrid. Su liderazgo y habilidades son clave en la presente Euroliga, donde el equipo blanco busca revancha y volver a ser fuerte competitivamente.