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Bam Adebayo es un jugador que, durante el año, fue observado por su crecimiento en Miami Heat, pero que obviamente en la burbuja de Orlando explotó al conocimiento global tras jugar unos playoffs fantásticos y llegar a la final contra los Lakers. 

Hace una semana, el colega de ESPN de origen nigeriano, Colin Udoh, publicó una nota sobre Bam y, entre otras cosas, tocó el tema sobre si podría llegar a interesarle jugar para Nigeria los Juegos Olímpicos, ya que podría hacerlo, puesto que su padre, que falleció este año nació en ese país. Bam le dijo a Udoh en su momento que consideraría la opción, que se abrió luego de ser uno de los últimos cortes de Estados Unidos para China 2019. Si hubiese jugado el Mundial, la opción estaría muerta. 

El tema con Nigeria es que potencialmente viene siendo candidata a sorpresas hace tiempo, aunque la verdad es que en el reciente Mundial dio un paso adelante. Le hizo un partido mano a mano a Rusia, Argentina lo desarmó en la segunda mitad, pero a los demás les ganó. Es cierto, eran todos rivales débiles, pero estuvo bastante mejor que en otros torneos donde fue un rotundo fracaso. 

En China, además, pudo meter por primera vez a casi todas sus figuras NBA e internacionales: Al-Farouq Aminu, Josh Okogie, Gabe Vincent, Jordan Nwora, Chime Metu, Michael Eric, etc. Un equipazo, aunque con un entrenador quizá no tan preparado como Alex Nwora, padre de Jordan. ¿Qué pasaría con este equipo, sumándole a Adebayo y a un coach bueno, tipo Ime Udoka, que ha jugado con la selección en su momento y viene de ser asistente en la NBA?

Es imposible saberlo, pero repitiendo a los buenos (Okogie, Udoh, Aminu, Nwora, Metu, Vincent) y dándole un toque con Adebayo, más una buena preparación y un entrenador de nivel, pareciera difícil que no saliera bien. Igual, las chances de que Bam juegue con Nigeria no son tan sencillas. Primero se lo tienen que ofrecer, después Adebayo tiene que aceptar y después tienen que esperar que la NBA arme un calendario corto o que Tokio mueva su fecha, porque está claro que Miami va a llegar lejos en los próximos playoffs. Igual, soñar a los nigerianos no les cuesta nada.