F4 Euroliga

Segunda Euroliga para Campazzo: ¡Real Madrid campeón de Europa!

17:06 20/05/2018 | El Madrid se impuso en la final al Fenerbahce por 85 a 80 y consiguió la décima Euroliga de su historia. Gigantesco mérito para los de Laso.

Foto Euroliga

La décima o la décima. Era la décima del Madrid o la de Obradovic, y en el marco de un espectáculo magnífico, el primero en entrar en la historia por sus 10 copas fue el conjunto español. Ganó por 85-80 y se quedó con el título más importante del básquet no NBA, la Euroliga, tras 36 partidos disputados y una gran paridad, sobre todo en esta F4 que la definió. De esta manera, Facundo Campazzo ganó el segundo trofeo europeo de su carrera (ambos con el Madrid), algo que también había logrado como argentino Hugo Sconochini. Fabien Causuer (17 puntos) y Luka Doncic (15 tantos), fueron los máximos anotadores del ganador.

El Madrid hizo 12 minutos iniciales muy buenos, controlando el tempo del partido, pero consiguiendo algunas cosas que formaban parte del libreto central, ayudados por una segunda falta muy temprana de Vesely que le quitó explosividad y potencia en el rebote. Pero pudo superar sin grandes problemas la presión defensiva todo el campo que metió Obradovic, mantuvo el resultado con su quinteto inicial disfrazado, controló a Muhammed y, cuando fue con toda la artillería, llegó a sacarle 8 (25-17), en el arranque del segundo período, aprovechando el reparto de responsabilidades,

Fenerbahce, que tiene mil variantes, encontró soluciones en el italianp Nicolo Melli, que le abrió la cancha con su amenaza de tiro, fue inteligente para anotar y forzar faltas y además formó parte del quinteto defensivo que más resultado le dio al entrenador serbio. Es cierto que, sin Llull y con Doncic, el Madrid es más previsible y más lento, lo que desembocó en general en malos tiros, producto del poco movimiento del balón y de penetraciones con descargas. El pibe maravilla tiene mucho tiempo el balón en las manos y eso, contra un equipo que dobla y defiende tan bien, es raro que funcione. Por eso los turcos se fueron al descanso largo 40-38 arriba, tras un cierre muy positivo de su hombre símbolo, Sloukas, autor de 5 puntos en el momento de darlo vuelta. 

Real Madrid ajustó algunos puntos con la misma idea del viernes: sostener el partido con su unidad menos ofensiva (Causeur, Reyes), pero resultó al revés. El francés entró encendido, anotando 8 puntos, y Felipe sacó toda su experiencia para hacerse un lugar en la pintura, y así retomó el liderazgo por 5 (55-50), aunque seguía con el problema de Melli, que no solo anotaba sino que abría la cancha para darle espacios a Wanamaker. Ya sin preocuparse tanto por las faltas, Vesely empezó a pesar con su juego aéreo y eso complicó el tema rebotes para los españoles. 

Igual, lo mejor que tuvo el Madrid en ese momento fue serenidad, y no se volvió loco con Melli, pese a que el italiano estaba en una noche increíble. Melli desequilibraba, pero el resto casi nunca. Era negocio. Una antideportiva de Vesely sobre Doncic le permitió al Real anotar 5 puntos en una sola acción y sacar 10 (71-61) a 6 minutos del final. Llull estaba afuera con 4 faltas, pero este Madrid no es el de otros años, y tuvo soldados y no solo caciques. Causeur siguió muy sólido, Tavares dio muchas soluciones atrás, Carroll defendió bien a Muhammed y los demás hicieron su trabajo. Parecía que los de Laso se encaminaban a un final tranquilo, pero un par de libres errados y el empuje de los turcos le puso cierto suspenso a la definición. A la larga, una corrección clave de Thompkins y dos simples de Causuer terminaron decretando el 85-80 final, con el cual los españoles terminaron consagrándose. Un campeón enorme y con doble valor por todo lo vivido durante la temporada.

 

Facundo Campazzo: 0 puntos, 1 rebote, 1 pérdida, 2 faltas en 9:07 minutos.
 
Fabián García / [email protected]
Enviado especial a Belgrado, Serbia
En Twitter: @basquetplus

 

 

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