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Lucas Pérez fue un rol importantísimo dentro del Quimsa que este miércoles se convirtió en el nuevo campeón de la Liga Nacional. El base le hizo un relevo perfecto a Nicolás Aguirre, ingresó normalmente desde el banco de suplentes pero sin dudas fue uno de los grandes protagonistas de la temporada y su actuación dentro de las Finales fue exquisita.

Además, Pérez tuvo un J6 de alto vuelo y marcó el punto de inflexión que empezó a definir la historia a favor de los santiagueños. En diálogo con Básquet Plus, el ex Lanús y Argentino de Junín contó sus sensaciones tras la conquista de Quimsa en la Liga.

- Yo sé que ahora se habla mucho del equipo, de la conjunción y del grupo humano, pero la última pepa no te la olvidás más.

. Y no, creo que fue el gol del partido así que me pone contento de que haya servido para coronar el año y salir campeón.

- ¿Tenían mucha presión?

. Sí, seguro, los dos equipos teníamos mucha presión. Para ellos no había mañana, nosotros queríamos cerrarlo hoy para de una vez por todas llegar a casa y disfrutar tranquilos porque nos lo merecemos.

- Desde que empezó la temporada yo siempre digo que es un poquito mentira que ustedes fueron los candidatos desde el día 1, porque por plantel no sé si antes de que inicie el torneo eran tan favoritos.

. Nada, nada... leímos Olé y no nos daban en el pelotón, ni siquiera dentro de los cuatro o cinco candidatos, así que pudimos ser la sorpresa.

- Sin embargo pasadas cerca de quince fechas parecían imbatibles. ¿Cómo fue el proceso de sobrellevar una liga tan larga, con algunos bajones por derrotas y lesiones, para volver a un rendimiento tan alto en playoffs?

. Eso más que nada es mérito del cuerpo técnico y también del grupo que fue inteligente. Primero el cuerpo técnico por formar el plantel que formó, que si bien nadie nos tenía en cuenta al principio nosotros ya nos habíamos dado cuenta que había buena química desde los torneos de preparación, veíamos que jugábamos bien al básquet y nos ilusionábamos con esto que estamos viviendo ahora. Después de ser un gran equipo fuimos un gran grupo, hay mucha química, realmente nos llevamos muy bien, logramos casi todos los récords de la Liga y eso nos dio margen para que faltando seis o siete fechas de la regular seamos el número 1 indiscutido. Tuvimos gran cantidad de lesiones pero esa ventaja de puntos nos dio tranquilidad, no para regalar partidos sino para bajar un cambio, esperando que todos se recuperen y repartiendo minutos. Ahí perdimos partidos que la gente quizá no se explicaba por qué, y más que nada era por todo eso. En playoffs nos volvimos a encontrar todos recuperados y volvimos a arrancar los motores.

- ¿Hay algún secreto para conformar un grupo tan heterogéneo?

. No, creo que no hay secreto. Es inexplicable eso, sino todos armarían buenos equipos, buenos grupos, habría química en todos lados y no es así. Silvio armó un grupo pensando en un objetivo, nos trajo a Robert (Battle) y a mí que más o menos sabíamos lo que Silvio tenía en la cabeza y lo que él quería como equipo, y pudimos hacérselo conocer a los demás jugadores. Después estuvo la incorporación de Diego (García) que es un talento innato para anotar, la explosión del Penka que por ahí no la esperaba nadie pero yo sabía que él venía trabajando muy duro desde su receso cuando no pudo conseguir equipo y se preparó muy bien sabiendo que iba a hacer una gran Liga; después la explosión de Gaby Deck que tampoco nadie lo tenía pero que creo que es el proyecto más importante de Argentina hoy por hoy. Y después todos somos jugadores de rol que sabíamos el trabajo que veníamos a hacer como Fernández Chávez, Sebastián Vega que también tuvo una excelente Liga, tuvimos la suerte de incorporar a Mainoldi que nos abrió muchísimo el juego... y después qué puedo decir de Robert? Es el MVP de la Liga por lejos. Creo que fue más que nada eso, pero fue todo cabeza de Silvio y después los jugadores entendimos el concepto de juego que él quería y desplegarlo, nada fácil.

- Casi todos los campeones tienen un momento de baches o dudas. ¿En ustedes fue ese que mencionábamos en el final de la fase regular o no lo hubo?

. No, no pensamos en eso como un bache. Sí por ahí hubo momentos de dudas, antes de conseguir el número 1 donde perdimos un par de partidos como aquel de Bahía Blanca o juegos donde dudábamos de la fortaleza del grupo ante objetivos que se nos escapó el récord de la Liga. No hubo el bache que nombrás, perdimos un par de partidos en el que jugamos mal al básquet pero fue más que nada eso. No teníamos ninguna duda de que íbamos a llegar acá y que íbamos a coronar el año, sabíamos que era un camino durísimo en los playoffs y sobre todo en la zona Norte, porque Atenas de Córdoba y San Martín de Corrientes venían de un gran cierre de segunda fase. Sabíamos que teníamos que luchar para llegar acá pero una vez que llegamos sabíamos que iba a ser nuestro.

- Recién Silvio dijo cuál era el partido que para él marcó que Quimsa podía o iba a tener chances de salir campeón. A ver si coincidís...

. Sin dudas fue el segundo partido en Quimsa contra Atenas, donde revertimos 18 o 20 puntos y demostramos el carácter de que no se nos escapaba nada. Por más que muchos decían que nos íbamos a caer o de que por ahí Atenas era el cuco, nosotros le dimos vuelta un partido de 20 puntos abajo en un cuarto y fue increíble. Después de ahí sabíamos que no nos iba a parar nadie.

Fabián García (enviado especial a Comodoro Rivadavia, Chubut)

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