Fueron dos partidos en uno, y como si fuese poco, el juego tuvo un cierre de película. Yendo del final hacia el principio, y con el marcador igualado en 58, Argentina tuvo el último ataque para ganarlo en el tiempo regular.
Florencia Chagas le dio el balón a Rocío Cejas, y esta, en su búsqueda por penetrar, caminó. Llegó el tiempo muerto solicitado por el banco local, y luego del mismo, la reposición en ataque para Bielorrusia.
Con sólo un puñado de segundos, el balón ingresó, pero las nuestras lo recuperaron casi de manera inmediata. Sabiendo que el match se moría, Sofía Acevedo no dudó en lanzar desde atrás de mitad de cancha, y con la ayuda del tablero, desató el festejo nacional.
Previo a eso, la celeste y blanca venía de un primer tiempo totalmente adverso. Con bajos porcentajes de tiro, muchas pérdidas y problemas para encontrar los caminos hacia el canasto, cerró el primer cuarto abajo 18-6, y el segundo 32-22.
La historia cambió a partir del tercero, cuando con una actitud totalmente distinta, Argentina buscó ser protagonista.
Mejorando de atrás hacia adelante, el volumen de nuestras chicas se incrementó en ambos costados del campo, y fue así como volvieron a estar en partido de manera muy rápida.
Ya en el último cuarto, el match se abrió totalmente, tornándose entretenido para los espectadores, y sumamente electrizante para las que competían dentro del parquet.
En ese ir y venir, donde no lograron sacarse diferencias y el liderazgo fue repartido, Argentina contó con la puntería de Acevedo, para quedarse con el triunfo, y este domingo tener en el mano a mano con Colombia, la chance de terminar en la décimo tercera ubicación.