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Este sábado comienza el Final Four de la NCAA, con la disputa de las semifinales en Glendale, Arizona. ¿Vas a seguir los partidos pero querés conocer más de los equipos y jugadores a seguir? No te preocupes, porque en Básquet Plus te tenemos cubiertos. Todo lo que tenés que saber de los cuatro semifinalistas, lo tenés a continuación.

South Carolina

Los Gamecocks son la gran revelación del torneo. Los dirigidos por el duro Frank Martin tienen marca de 26-10 en la temporada, la más floja entre los semifinalistas, por un buen margen. Sin embargo, vienen haciendo unos playoffs excepcionales, con una identidad de juego muy definida: básquet ultra físico y defensivo. South Carolina no tiene tantas variantes ofensivas, tiradores naturales o ni siquiera un base puro en su quinteto. Pero con muchísima intensidad y entrega, vienen dando la sorpresa.

Los de Martin proponen un básquet metódico en ataque, con pocas posesiones y mucha apuesta a llevar la bola al poste bajo, incluso con sus perimetrales. De todas maneras, todas sus virtudes se potencian en el costado defensivo, donde por momentos parecen impenetrables, con cinco jugadores versátiles y capaces de marcar múltiples posiciones. La gran pregunta es si con eso les alcanzará frente a rivales con más talento como Gonzaga, aunque por ahora, la respuesta a esa pregunta viene siendo afirmativa. No son favoritos, está claro, pero hay que tener mucho cuidado con ellos porque son el equipo que llega a Arizona con más impulso e ímpetu.

En cuanto a jugadores a seguir, la gran figura del equipo (y quizá del Torneo NCAA), es Sindarius Thornwell. Sin gran altura pero con enorme potencia física, Thornwell cumple funciones sumamente variadas, viendo minutos desde la posición de base hasta la de ala pivote. En él queda simbolizado el espíritu de South Carolina: sin tanto talento técnico, pero con una voluntad y agresividad fuera de serie. 

El resto acompaña desde su rol. PJ Dozier siendo de los más creativos con el balón en sus manos, Duane Notice aportando algo de tiro exterior y la dupla extranjera del juego interno, Chris Silva (Gabón) y Maik Kotsar (Estonia), trayendo presencia interna defensiva y ofensiva, respectivamente.

Gonzaga

Al igual que para South Carolina, este es el primer Final Four en la historia de una Universidad que hace años promete, pero que recién este año pudo cumplir con las expectativas. Los Bulldogs están haciendo una campaña extraordinaria, llegando a este duelo con marca de 36 victorias y apenas una derrota. Estadísticamente tienen la mejor defensa del torneo y una capacidad rebotera superlativa, pero a la vez un ataque con variantes y profundidad.

Gonzaga sale a la cancha con un esquema muy definido: un base natural y creativo (Nigel Williams-Goss), dos tiradores (Jordan Matthews y Josh Perkins), un ala pivote abierto y atlético (Johnathan Williams) y una mole en el juego interior (Przemek Karnowski). Además, encuentran soluciones en el banco, por ejemplo con un Zach Collins que es de los mejores suplentes de la competencia y que puede acabar siendo la variable necesaria para el éxito del equipo.

La clave del equipo pasa por su base, Williams-Goss, un jugador vertical, anotador y peligroso en transición. Habitualmente intenta llevar a armadores más pequeños al poste bajo, pero le costará hacerlo frente a un South Carolina enorme en todas sus líneas. El otro jugador de uno contra uno de los de Mark Few es Karnowski, un polaco de más de 130 kilos y buen toque para jugar de espaldas al aro.

Un punto fundamental para Gonzaga pasa por su lanzamiento externo. Tienen a siete jugadores distintos que promedian un 36% de acierto o superior, lo cual podría terminar siendo decisivo ante un South Carolina casi sin tiradores. Los Bulldogs van a precisar del triple para abrir la impermeable defensa de los Gamecocks o sino, podrían estar en serios problemas.

Oregon

Los Ducks vuelven a un Final Four después de casi 80 años y lo han hecho dando algunas sorpresas, incluyendo un triunfazo ante Kansas (candidato al título) en la ronda anterior. Oregon, que era considerado uno de los equipos más fuertes antes del comienzo de la temporada, tuvo un bache durante el transcurso de la misma, pero parece haber encontrado su mejor rendimiento en el momento adecuado. Llegan encendidos y jugando un básquet de gran nivel.

Los de Dana Altman juegan con pocas posesiones, pero a la vez presentan una formación dinámica con cuatro perimetrales y un pivote chico de gran movilidad. Ofensivamente tienen hasta cuatro titulares distintos capaces de crear con el balón en las manos y un gran número de tiradores certeros. De los cuatro semfifinalistas, son los más estéticos y técnicos, aunque también tienen su cuota explosiva.

La figura del equipo es el canadiense Dillon Brooks, un alero corrido a la posición de cuatro, que crea mismatches constantemente, siendo capaz de postearse, atacar desde el drible o tomar el tiro de tres. No por nada viene de ser elegido como el mejor jugador del Pac 12. Igualmente, la historia de Oregon en este Torneo NCAA viene siendo comandada por Tyler Dorsey, apodado Mr. March, por sus grandes rendimientos en los juegos claves. Dorsey es un anotador natural, con mano de seda. Cuando las defensas se cierran y Brooks no tiene espacios, Dorsey va a estar creando desde el centro de la cancha.

La tercera pata clave de este empuje de Oregon en la postemporada es el pivote Jordan Bell, un jugador algo limitado técnicamente, pero con una capacidad atlética muy destacada y sobre todo, un instinto taponador increíble (junto a otro canadiense como Chris Boucher hicieron de los Ducks el equipo con más tapas del torneo). Bell viene teniendo unos últimos partidos sensacionales y es el motor en cuanto a la energía que contagia. Ah, y cuidado con el tercer canadiense del plantel, Dylan Ennis, un base tremendamente físico y que suele aparecer en los momentos calientes.

North Carolina

A diferencia de los otras universidades, muy poco acostumbradas a estas instancias, los Tar Heels son un habitué de este tipo de definiciones y la 2016/17 los ha vuelto a dejar al alcance de un nuevo título. North Carolina es por nombres, el gran candidato entre los cuatro pero habrá que ver cómo maneja esa presión ante rivales con menos que perder. ¿Podrán tomarse revancha tras la frustración del año pasado, cuando perdieron la final en la última bola ante Villanova?

Los de Roy Williams son el equipo más NBA del Final Four: tienen el ataque más eficiente, poseen mucha altura y capacidad atlética en casi todos los puestos y rotan hasta nueve jugadores, mientras el resto suele quedarse en siete. Es cierto que no tienen tanto tiro exterior, pero lo compensan con un gran protagonismo cerca del aro rival, ya sea con poste bajo o penetraciones (son el equipo con más dobles convertidos de toda la nación).

La gran figura del equipo es Justin Jackson, un alero muy versátil al que mueven constantemente entre cortinas y que no suele tomarse demasiado tiempo para sacar su tiro o si tiene el espacio, recibir y penetrar. UNC no posee grandes creadores perimetrales, pero en su lugar mueve muy bien la pelota (2° en asistencias) y la facilidad de jugadores como Jackson para encontrar espacios es uno de los secretos más grandes de ese éxito. Además, Joel Berry es un base anotador con mucha experiencia en este nivel, mientras que el escolta Theo Pinson resalta como el mejor pasador del quinteto, además de buena fortaleza defensiva.

De todas formas, el mayor fuerte del equipo está en su juego interior. Kennedy Meeks es una mole y uno de los mejores anotadores de poste bajo de la NCAA; Isaiah Hicks es muy atlético y efectivo como definidor; Tony Bradley es un novato de excelentes condiciones, mientras que Luke Maye viene siendo el factor x en esta postemporada, trayendo tiro externo desde el banco (en la última ronda eliminaron a Kentucky gracias a un doble agónico suyo).

Calendario

South Carolina y Gonzaga se enfrentarán este sábado desde las 19:09 de nuestro país, mientras que el choque entre Oregon y North Carolina está pactado para las 21:49.