Esta nueva área de la estructura de la Confederación Argentina de Básquetbol continúa vigorosamente en su afán de diagnosticar y elaborar guías para la optimización de la actividad del Mini Básquetbol. Apenas unos meses después de la confección de la encuesta nacional, se recabó y procesó toda la información para generar una serie de premisas de organización.
A partir de esta investigación, el equipo de trabajo del coordinador Juan Lofrano creó las sugerencias reglamentarias para todo el desarrollo del Mini Básquetbol 2019. El objetivo de estas pautas se centra en brindar a todos los protagonistas de este universo una serie de características de la estructura de juego, para implementarlas durante este año. Con el correr de los meses se analizará el impacto y se buscará en definitiva consensuar, democráticamente, el formato de competencia para el 2020.
Dentro de una amplia gama de postulaciones, estas sugerencias se atraviesan por el concepto de recuperar el valor de la enseñanza, con la estimulación del espíritu lúdico y con la dotación de herramientas técnicas, tácticas, vinculares, emocionales, motrices y reglamentarias. De esta premisa central se desprende la idea de no implementar competencias por puntos, que ponderen al campeón por encima del aprendizaje. La noción es que lo importante no es ganar, sino competir bien.
Otro de las proposiciones interesantes se halla en la división en Avanzados o Inicial, que pretende superar la visión cronológica o la selección por nivel de juego. El principio que se pregona es que algunos chicos juegan bien y otros todavía no.
En relación con los formatos, esta guía propone que en Cebollitas y Pre Mini se desarrolle la modalidad de 3X3 en canchas transversales, con seis cuartos de ocho minutos a reloj corrido. En tanto que en Mini se pregona el tradicional cinco contra cinco en cancha entera, con cuatro cuartos de diez minutos netos, con un mínimo de diez jugadores y un máximo de quince. Y en este apartado se refuerza el perfil de formadores, por lo cual se estimula a que los niños participen en dos cuartos diferentes, con un reparto equitativo de los minutos.
El coordinador del Departamento de Mini Básquetbol, Juan Lofrano, aporta sus concepciones respecto a estas sugerencias. “El objetivo macro es masificar el Mini, necesitamos crecer en la tasa de chicos que juegan al básquet y esa visión nos marca el rumbo. Volvemos a insistir sobre la fuerza de la enseñanza, el verdadero campeonato es poner más niños dentro de la cancha”, expresa el entrenador.
Una de las líneas basales de todo este trabajo yace en la creación de diferentes variantes para las transiciones entre categorías. Estas propuestas se implementarán en el segundo semestre y brindan ideas como un Gran Prix con tres o cuatro equipos en cancha, o competencias de fundamentos, así como Final Four con equipos de un nivel similar y también encuentros con formato 3X3 de FIBA. Otra de los planteos es animarse a sacar el básquet a la calle, para difundir el deporte e incitar a otros chicos a sumarse.
Todo este trabajo titánico se reparte a las federaciones, asociaciones y entrenadores de todo el país con una detallada presentación. Podés encontrar el documento completo haciendo click acá.