Basquetplus.com

Si bien es cierto que la Conferencia Oeste vuelve a aparecer como la más fuerte del torneo, hay una zona del Este que puede pelearle de igual a igual a cualquiera del otro lado del país. Estamos hablando de la División Atlántico, donde justamente aparecen los tres máximos favoritos a pelear por el reinado dejado vacante por LeBron James y los Cleveland Cavaliers: los Boston Celtics, los Philadelphia 76ers y los Toronto Raptors.

¿Quién parte adelantado en esa lucha? Claramente Boston, a quienes hoy tranquilamente podríamos colocar como el segundo mejor equipo del torneo, por detrás del bicampeón Golden State y luchando mano a mano esa condición con Houston. Los Celtics no solo recuperaron a Gordon Hayward (se perdió toda la 2017/18) y a Kyrie Irving (no estuvo en los playoffs), sino que además mantuvieron a todos los hombres claves de la temporada anterior. Tienen la mejor defensa de la liga, al mejor entrenador y a un quinteto inicial de excepción, con variantes y versatilidad abundante. Son el rival a vencer.

El otro equipo que parece ser una garantía dentro del Atlántico es Philadelphia, que si bien perdió algunos hombres de rol importantes (Ilyasova, Belinelli) sigue empujado por el crecimiento de Ben Simmons y Joel Embiid, más un buen grupo de piezas complementarias. A diferencia de Boston, sin embargo, no sumaron ningún jugador que pueda darles un salto de calidad, más allá de la evolución lógica de sus jóvenes. ¿La incógnita? Cuánto aportará Markelle Fultz, el uno del Draft 2017, quien viene de una campaña de rookie para el olvido.

A diferencia de Boston y Philadelphia, con Toronto hay mayores interrogantes, principalmente ligados a su nueva figura central: Kawhi Leonard. Si el exSpurs está en su mejor versión, son un candidato claro a pelear por el título de la conferencia, con un gran quinteto defensivo y una banca gana partidos. El problema es que hace más de un año y medio que no vemos a Leonard en el tope de su juego y no sabemos exactamente con qué nos vamos a encontrar en esta 2018/19. De todas maneras, a tener mucho cuidado con ellos.

Lejos del poderío de las tres franquicias analizadas, aparecen las dos neoyorquinas: Nets y Knicks. En el caso de Brooklyn, que contará con el debut de Pablo Prigioni como asistente NBA, están en una clara etapa de reconstrucción, priorizando el desarrollo de jugadores jóvenes. Los playoffs parecen una utopía, aún en el débil Este y la mayor atención está depositada en el desarrollo de D´Angelo Russell, Caris LeVert y sobre todo, Jarrett Allen.

En el caso de los Knicks es más difícil encontrar un rumbo claro. Con Kristaps Porzingis sano (no hay fecha para su regreso), podrían aspirar a la postemporada. Pero sin el letón, parecen ser uno de los planteles más flojos del torneo. No tienen un base titular (en la pretemporada han probado con Ntilikina, Burke y Mudiay) y su segunda unidad deja mucho que desear, aunque al menos será interesante observar al novato Kevin Knox (amenaza con ser de los rookies más determinantes de la temporada) y ver cuánto de su impronta puede darle el exGrizzlies David Fizdale.