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El primero en avanzar fue Regatas, pero el local reaccionó y con bandeja de Thomas y triple de Massarelli pasó al frente por la mínima (8-7) a los cuatro minutos. Ambos tiraban y embocaban desde afuera, se mantenía la paridad en un encuentro de ida y vuelta, y por eso, al cabo de seis minutos estaban 17 iguales. Un triple de Orresta y cinco puntos de Clayton para terminar el primer cuarto 27-19, parcial 9-0 mediante. 

En el inicio del segundo Sebastián Orresta tuvo que dejar la cancha por una torcedura de tobillo izquierdo. Sin embargo, Ferro sacó diez de luz (31-21), que luego llegó a ser de doce gracias al aporte de Thomas y de Hernández. Cuando los dirigidos por Lucas Victoriano se acercaron, el capitán local, embocó un triple (41-30) para delirio del público que se acercó hasta el estadio. Laginestra movió las piezas de manera de continuar con la dura defensa que proponía el local y logró una distancia de once (44-35) de cara al complemento. 

En el segundo tiempo Ferro puso quinta y estiró a 14, pero la visita reaccionó, y en una ráfaga de un minuto metió un parcial 5-0 para que Laginestra pidiera minuto con las cosas 51-42. El partido se trabó, la visita ajustó la defensa provocando algunas perdidas locales, así y todo, como en La Boca 48 horas atrás, aparecieron los triples de Lucho Massarelli para darle un poco de aire al conjunto local, golpeado por las lesiones. El local sacó 14 nuevamente (56-42) en la mitad del período, y en el final, a pesar de la marca asfixiante del conjunto remero desde el inicio de los 24”, llegó a ponerse 60-42. Juan Martín Bello entró en el segundo cuarto tras la lesión de Orresta y al pibe no le tembló la muñeca: comandó todas las ofensivas (salvo cuando ofició de base Massarelli) y hasta convirtió dos triples para cerrar el tercero 66-47.     

En el último chico la visita achicó en el inicio con un 7-0 y dejó a Ferro sin convertir por cuatro minutos. El Fantasma se puso a diez (68-58) con goles de Gallizzi y Smith y el banco local volvió a pedir tiempo muerto. Ambos equipos ponían mucho empeño: el local alternando fichas para minimizar el desgaste físico, sin dejar de ser feroces y rápidos en ataque, por momentos jugando sin un base natural; la visita, ya sin Gallizzi en cancha por cinco faltas personales, cometía errores y el tiempo pasaba. Cuando la visita se acercó, Bettiga marcó de tres y luego se fue por faltas con el tablero 78-67. Regatas achicó a través de Arengo, pero el resultado ya era de Ferro 78-69.