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En un verdadero partidazo, que sacó a relucir el corazón del Murcia y los problemas para cerrar partidos que viene acarreando el Madrid, los de Laso sufrieron más de la cuenta para imponerse como visitantes por 104 a 99, en tiempo suplementario.

Facundo Campazzo tuvo un buen partido ante su ex equipo, terminando con 13 puntos, 7 asistencias y 5 rebotes, más allá de estar complicado con faltas personales durante todo el juego.

El duelo comenzó con un Benite encendidísimo en el local. El brasilero sumó 17 puntos en el primer cuarto y su equipo llegó a tener seis de diferencia, aunque el Madrid reaccionó de la mano de Fernández y Llull, para empatar en 26 el parcial.

Las primeras diferencias en favor de la visita se iban a ver en el segundo período. El Murcia tenía serios problemas defensivos y cada ataque del Madrid terminaba en conversiones o faltas recibidas. Los capitalinos, que recordemos no tuvieron a Andrés Nocioni debido a un esguince de tobillo, tomaron control de las acciones y con una bomba del prodigio esloveno Luka Doncic, se fueron a los vestuarios al frente por 52 a 42.

A la vuelta, no cambió demasiado. Al Murcia le costaba horrores frenar cada ofensiva de su rival, sufriendo especialmente en el juego interior (se sintió la falta de Faverani). En el otro costado, Lishchuk era el único que sumaba con regularidad, pero entre Llull, Fernández y Ayón, le dieron a los suyos una máxima de 19, que luego se redujo a 14 al finalizar el cuarto.

Todo parecía terminado para el Murcia, no sólo por la distancia, sino por la facilidad que tenían los madrileños para sumar en el aro contrario. Sin embargo, lejos de entregarse, los de Katsikaris salieron al último cuarto con la idea de quemar las naves, subiendo la presión y jugando con mayor decisión en ataque. ¿El resultado? El Madrid se secó, estando cinco minutos sin anotar y el partido tomó otro color.

Ya con un escenario más parejo, el local siguió bajando la brecha, hasta que logró quedar a tres, con bombas de Radovic y Antelo. El Madrid no podía mover su marcador y el dueño de casa tuvo un par de chances para igualarlo, de la mano de Campazzo (primero falló un triple y luego un libre, en una falta generada a pura picardía) y Cabezas (erró de tres).

Luego del 2 de 3 de Campazzo en libres, con siete segundos en el reloj, Sergio Rodríguez extendió la diferencia a tres (93-90) desde la línea. El Madrid marcó bien la salida de Campazzo y por eso, la bola quedó en manos de Cabezas, que sin tiempo por perder, recorrió tres cuartos de cancha y anotó un triple milagroso, para forzar la prórroga y hacer venir abajo el estadio.

El Murcia parecía tener todo el envión para llevarse el partido en los cinco minutos extras, pero terminó pagando caro su debilidad en el juego interior. La visita siguió fallando mucho más de lo que encestó, pero a los de Katsikaris se les hizo imposible asegurar el rebote defensivo y Doncic se los hizo pagar con un par de conversiones decisivas.

Además, el local perdió claridad en ataque y evidenció el enorme gasto que había hecho durante los 10 minutos finales del tiempo regular. El Madrid no tuvo sobresaltos en los segundos finales y acabó quedándose con la victoria por 104-99, en un encuentro que de todas maneras, deja con muchas dudas a los visitantes y con cierta tranquilidad y orgullo a los locales.

Facundo Campazzo: 13 puntos, 7 asistencias, 5 rebotes, 4 pérdidas, 1 robo, 4 faltas cometidas, 4 faltas recibidas, 2-5 en dobles, 2-6 en triples y 3-5 en libres durante 28:25 minutos de juego.