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Otra derrota para el Real Madrid en la Euroliga. El equipo blanco sumó su tercera caída en la Euroliga y se muestra irregular en el certamen continental. Ahora perdió en su visita al Strasbourg francés por 93-86, en un partido donde tuvo un rendimiento opaco y siempre tuvo que correr desde atrás. Al igual que muchos de sus compañeros, la tarea de Andrés Nocioni fue discreta.

Strasbourg inició el juego mucho más fino, más agresivo y atacando la fragilidad defensiva del Real. Rápidamente el dueño de casa se puso 7-0 arriba, en un parcial donde Weems, Golubovic y Beaubois dañaron con el tiro abierto y llegaron a construir una ventaja de 22-9, máxima de trece tantos para el elenco galo.

La reacción del Madrid llegó en los últimos cuatro minutos, equiparando un trámite sombrío y con una ráfaga de puntos que debió apoyarse en la defensa para disminuir la brecha. Un gran pasaje de Llull (en armado y defensa), ayudado también por el aporte ofensivo de Rudy, imprimieron un tramo frenético de 14 a 0 para la Casa Blanca. Al finalizar el primer capítulo, los españoles se adelantaron 25-24.

Pero en el siguiente periodo la historia empezó a tener un dominador. El trámite fue peleado en cuanto al marcador pero los franceses controlaron las acciones, dañaron con los triples cada vez que se lo propusieron y pusieron contra las cuerdas a un Madrid que sufrió en ambos aros.

Exceptuando algún pasaje de Taylor, lúcido en un par de acciones, al Madrid le costó muchísimo defender y tuvo dolores de cabeza cada vez que Llull no estuvo en cancha. Esa defensa condenó, las rotaciones y propuestas de Laso (en un momento utilizó a Chapu de 3 y a Maciulis de 4) no sirvieron y el Strasbourg se fue al descanso largo arriba por 51-44.

Aquel buen cierre del Madrid en el primer cuarto pareció haber sido un espejismo, el Strasbourg elevó mucho más su muro en defensa y anuló el potencial ofensivo de los españoles. Los franceses tampoco tuvieron inconvenientes en el ataque y jugaron muy sueltos, arrancando el tercer capítulo con un parcial de 9 a 0 para escaparse a catorce: 60-46.

El Real se desencajó cometiendo algunas faltas sin sentido y cayó en un pozo muy profundo del que costó salir. Al problema de la defensa se le sumó la poca contribución en ataque, ya que sin el tridente Rudy-Llull-Taylor careció de otras vías de gol (flojos Felipe Reyes y Chacho Rodríguez).

El dominio del Strasbourg siguió ejerciendo supremacía y el dueño de casa sacó una brecha de diecinueve (71-52), dentro de un tercer periodo para el olvido del Madrid. Al cierre del capítulo y con el marcador situado en 93-86, el cuadro francés ya se sintió demasiado cómodo.

Campbell (que jugó un enorme partido y fue la gran figura de la noche) metió una máxima de 83-63 apenas comenzado el último periodo. Con un poco de Llull y un buen tramo de Taylor, la brecha tardó en disminuirse pero el Real llegó a ponerse abajo por tan solo un dígito (87-78) a falta de dos minutos, permitiendo esperanza en unos españoles de noche desdibujada pero aún en juego.

De todas formas, a pesar de que la diferencia en el marcador bajó considerablemente el equipo galo supo manejar esa brecha a su favor. El Real tampoco es que haya mejorado en ese cierre, sino que el Strasbourg desaceleró su intensidad y permitió que los españoles se aproximen.

No hubo milagro ni forma de maquillar la noche opaca de la Casa Blanca, que siguió desentonada y terminó cayendo 93-86 en un partido que requerirá su análisis por lo preocupante de su rendimiento. El dato a rever: el Madrid erró 19 de los 26 triples que intentó, marca muy pobre para este equipo.

. Andrés Nocioni (Real Madrid): suplente, 2 puntos (1/3 en dobles y 0/4 en triples), 4 rebotes, 1 falta cometida y 1 recibida en 15m26s.

Lucas Leiva / [email protected]
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