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Nadie puede negar que tanto James Harden como Russell Westbrook están teniendo temporadas muy positivas, que de hecho los han puesto en la consideración para el premio a MVP de la 2016/17. Sin embargo, sus números demenciales tienen un lado negativo: la cantidad de pérdidas que suman por encuentro.

A tal punto son exageradas las cifras, que la realidad es que la NBA nunca ha visto semejantes estadísticas. Harden, por ejemplo, ya batió su propio récord del año pasado y es el jugador con más balones perdidos en una misma campaña (376, contra 374 en la 2015/16). ¡Y todavía le faltan 17 partidos!

Russell Westbrook, por su parte, no se queda demasiado atrás. Ya está empatado en el octavo puesto de la lista histórica (348), pero si tenemos en cuenta los 18 juegos que aún le faltan disputar, seguramente terminará segundo (por detrás de Harden) de todos los tiempos. Y por un buen margen.

Por otro lado, tanto Westbrook como Harden parece que terminarán la temporada con un promedio superior a las 5 pérdidas por partido. Esto sería la primera vez que ocurre en la NBA, con Pete Maravich siendo el que más cerca estuvo de lograrlo: tuvo una media de 4,96 en la 1977/78.

Más balones perdidos en una misma temporada