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El partido enfrentaba a dos equipos que debían mostrar una mejor cara, luego de un par de debuts muy flojos. Sin embargo, el arranque tuvo poco de ese cambio: ambos conjuntos iniciaron lento, tardando un par de minutos en mover el marcador. El inicio fue parejo, con Marquinhos (8 puntos) destacándose en Brasil y la mediacancha Sosa-Feldine por Dominicana.

El resto del primer período se mantuvo en ese camino de paridad, no precisamente porque estuvieran haciendo bien las cosas, sino todo lo contrario. A las dos selecciones les costaba encontrar la red con frecuencia y los porcentejes eran bajos. Ricardo Fischer y Vítor Benite le dieron algo de gol a su equipo, pero en el rival James Feldeine seguía derecho y el marcador quedó empatado en 16, tras 10 minutos de acción.

Afortunadamente, el segundo parcial iba a levantar el nivel, al menos en el caso de los dirigidos por Magnano. Benite tomó las cosas donde las había dejado y desde el perímetro, adelantó a los sudamericanos por 25 a 20. Más tarde se le unió Fischer y ante un Dominicana apagado, la diferencia subió a 8 (34-26).

Por primera vez en el certamen, Brasil mostraba cierta fluidez en su ataque, mientras que también estaba fuerte atrás, favorecido por un contrario que abusaba (sin resultados) del 1 vs 1. La última jugada del primer tiempo, fue un reflejo de la actuación dominicana: casi sin tiempo en el reloj, Ángel Suero le cometió una falta a Marquinhos, quien tomaba un triple a la carrera desde 8 metros. El alero sumó desde la línea y los suyos entraron al descanso largo al frente por 45 a 32.

Las esperanzas de una reacción de los de Atkins quedaron descartadas rápido. En las primeras posesiones del tercer período, apareció por primera vez en el torneo Augusto Lima en su máxima expresión, mientras que Guilherme colaboró con un triple para llevar la diferencia a 20 (52-32).

A partir de ahí, ya con el trámite cerca de estar resuelto, los de Magnano bajaron el ritmo y con un encendido Rigoberto Mendoza, Dominicana pudo recortar la distancia. De todas formas, el 58-45 con el cual ingresaron al último cuarto no dejaba de ser considerable.

Si los centroamericanos aspiraban a una remontada heróica, debían salir a quemar las naves temprano. No sólo no lo hicieron, sino que apenas anotaron dos puntos en los primeros tres minutos, dejando a los brasileros casi con la victoria en sus manos.

El doble dígito de distancia se mantuvo prácticamente durante el resto del encuentro, hasta que un mal cierre de Brasil recortó la brecha. Su triunfo nunca estuvo en duda, pero Dominicana logró bajar a un final de sólo seis unidades (71-65), lo cual puede ser fundamental en un Grupo A sumamente parejo.

De todas maneras, Brasil mejoró mucho su imagen comparado a lo del lunes y demostró que no ha viajado a México a pasear, como algunos ya parecían creer. Dominicana, ya no sólo tiene que mejorar pensando en una chance de semifinales, sino especialmente de avanzar de ronda, algo que si siguen jugando así, será complicado que logren.

Brasil (71): Rafa Luz 3, Vítor Benite 6, Marquinhos 17, Rafael Mineiro 0 y Augusto Lima 6 (FI); Ricardo Fischer 10, Leo Meindl 5, Olivinha 2, Guilherme 5 y Joao Paulo Batista 10. DT: Rubén Magnano.

República Dominicana (65): Edgar Sosa 11, James Feldeine 20, Francisco García 5, Orlando Sánchez 0 y Edward Santana 0 (FI); Rigoberto Mendoza 14, Ángel Suero 1, Eloy Vargas 4, Eulis Báez 4, Luis Flores 0 y Juan García 6. DT: Kenny Atkinson.

Parciales: 16-16, 45-32, 58-45 y 71-65.

Árbitros: Stephen Seibel, Steven Anderson y Roberto Oliveros.

Estadio: El Palacio De Los Deportes.