Basquetplus.com

El campeonato logrado por Bahiense del Norte en la final del Argentino de Clubes U17 ante Central de Ceres fue opacado por los incidentes que tuvieron lugar en los minutos finales del partido. Más puntualmente, una agresión de parte del entrenador, Enrique Lancelloti, que fue a recriminarle un cobro a uno de los árbitros. Luego, los propios jugadores del equipo comenzaron a insultar a los jueces (Andrés Casina, Mariano Slusar y Matías Carrizo) e incluso un particular ingresó al campo de juego, por lo que los referís tomaron la decisión de suspender el encuentro cuando restaban 1:26 minutos.  

Finalmente, el partido se dio por concluido y se otorgó la victoria y el campeonato a Bahiense del Norte por 71-64. Con respecto al encuentro, el jugador del equipo de Bahía Blanca, Emanuel Fernández, habló con la prensa del diario La Nueva y comentó que "cuando tenés una linda diferencia y te la bajan, tanto por errores propios como por acierto de ellos, hay que tranquilizarse y volver a lo que habíamos hecho bien en su momento. El Colo (Navallo) transmitió tranquilidad y nos pidió que sigamos compitiendo, que es para lo que estamos". 

En el partido, las diferencias fueron amplias en los dos primeros cuartos, ya que Bahiense sacó una diferencia de 21 puntos a 6:26 del final del segundo periodo (34-13). Sin embargo, Central logró achicar el déficit y empató el encuentro en el cuarto parcial (56-56). A partir de ese momento, Fernández y Pedro Rossi tomaron preponderancia y, sumado a un triple de Bassa, lograron quebrar la zona de su rival para escaparse en el tablero electrónico con 1:58 restantes (71-61). Segundos después, en el minuto 1:26, los árbitros decidieron dar por suspendido el partido y luego por finalizado, dándole el triunfo y el campeonato a los de Bahía Blanca. 

Con respecto a los incidentes, se tendrá que aguardar por el informe del cuerpo arbitral en contra de Central Argentino. "Nosotros no somos los encargados de evaluar el desempeño de los árbitros, pero creemos que nada de lo que haya sucedido justifica la violencia. Es una categoría formativa en la que debe privar el desarrollo de los protagonistas y estas cosas manchan el enorme esfuerzo que siempre se hace de todas las partes involucradas", expresaron desde la Confederación Argentina de Basquetbol (CABB).

A su vez, Leandro Ginóbili dejó sus sensaciones y al respecto comentó que "la reacción fue totalmente innecesaria de parte del entrenador por una falta clara es injustificable y abrió la puerta a la enajenación de los chicos y padres que había en la cancha. No merecíamos ese final, que además incluyó una agresión a los jueces. Una vergüenza".