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Cumpliste el sueño que estabas esperando desde tu primera etapa en Quimsa...

Sí, la verdad que hace mucho venimos soñando con esto. El club hace las cosas muy bien institucionalmente, en algún momento se le tenía que dar. Venimos trabajando muy duro desde la pretemporada. Sabemos que teníamos con que pelearle a cualquiera y lo demostramos en esta primera mitad de la temporada.

Si hace dos años te decían que ibas a volver a Quimsa, a estar así fisicamente, ser MVP y campeón del Súper 8, ¿qué decías?

Uno siempre sueña con ganar, estar en lo más alto donde va a jugar. Es un sueño. Si me lo hubieran dicho antes no me lo hubiese creído, pero hoy lo estamos haciendo realidad y estoy muy feliz por eso.

¿Cuánto tenés que ver vos en tu cambio?

Yo he hecho un click en mi vida. He podido bajar de peso, ponerme bien fisicamente. Eso me ha ayudado mucho para mi rendimiento. Creo que también mi nivel pasa porque el cuerpo técnico y mis compañeros me dan toda la confianza del Mundo para hacer lo que quiera. Así me salga bien o mal ellos confian en mi.

Hoy sos uno de los dos mejores bases del torneo. ¿Se estiró tu techo como jugador?

No se, eso lo decidirán ustedes. Yo siempre intento mejorar para dejar lo más alto posible al club. Siempre puedo seguir mejorando, que es lo que uno más quiere.

Sos uno de los tipos que más puede hablar sobre la historia de Quimsa. En otros años siempre les faltó algo, ¿qué cambió en este para que no les falte nada?

Creo que se han juntado las dos partes. Institucionalmente siempre estuvo, quizás faltaba química entre cuerpo técnico y jugadores. Creo que otras veces eso faltó un poquito y hoy por suerte lo estamos teniendo. Eso se ve reflejado en el juego. Estamos jugando bien tanto atrás como adelante. La confianza que nos da el cuerpo técnico y lo bien que nos sentimos jugando uno al lado del otro, creo que es lo más importante de todo.