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Había toda un aura de que se podía ver la primera vuelta de un 0-3 de un equipo en playoffs y más aún las criticas se las llevaba el propio entrenador de los Sixers, Doc Rivers por sus antecedentes de ser el único al que le dieron vuelta un 1-3 dos veces. Bajo esa premisa, Philadelphia salió con todo y a partir de un gran segundo tiempo se impuso por 132 a 97.

La ofensiva balanceada, el trabajo de Joel Embiid (33 puntos, 10 rebotes), la dirección de orquesta de James Harden (22 puntos y 15 asistencias y la energía fundamental de Tyrese Maxey (25 puntos y 8 asistencias) fueron los pilares para un triunfo de Philadelphia, muy sólido a partir del tercer cuarto (lo ganó 37-17). Los Raptors estuvieron a tono de la situación en la primera etapa y luego sucumbieron en una mala racha de lanzamientos (tiró para un 39 por ciento de cancha) que les quitó confianza y energía para defender.

Al juego le quedó casi de más el último cuarto, Philadelphia nunca dejó sobreponerse al local y terminó quedándose con un triunfo fundamental para avanzar a las semifinales y sacarse de encima la mochila de tener que llegar un séptimo juego tras haberse adelantado 3-0.