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Pablo Prigioni cuando estaba adentro de la cancha era un jugador totalmente altruista, pensando siempre en el equipo antes que su beneficio personal y de carácter muy fuerte, capaz de gritarle a un compañero en pos de que este se despierte y empiece a competir. Además su costado defensivo estaba destacado por una fuerte tenacidad y con esa premisa puede surgir la comparación con Patrick Beverley en el estilo de juego.

En una charla con IQ Podcast, conducido por los periodistas Fernando Tirado y Toño Rodríguez, el ex Knicks habló sobre lo que significa la nueva figura psicológica con la que cuenta Minnesota para sentirse con confianza a la hora de enfrentar a cualquier rival.

“Le considero un jugador que ha cambiado al nuestro equipo por su tenacidad defensiva, por mantener a todo el mundo concentrado siempre, no solo a jugadores sino a todo el staff. Es un jugador que ha modificado mucho al equipo y gran parte de esta nueva mentalidad de Minnesota se la atribuyó a él. Siento que los jugadores jóvenes se sienten protegidos con él al lado, es un jugador entrenador dentro de la cancha y tranquilamente se vislumbra un futuro por ese lado para Patrick”, destacó el hombre oriundo de Río Tercero.

Prigioni y Beverley llegaron a ser compañeros cuando el cordobés pasó por los Rockest y allí conoció de primera mano al por ese entonces joven Pat. “Tuve la suerte de compartir equipo con él en Houston por un tiempo. No jugamos juntos porque justo se lastimó la mano y estuvo mucho tiempo fuera, pero compartimos tiempo dentro del mismo plantel. Siento mucho respeto de él hacía a mí y por supuesto que tiene todos mis respetos”, señaló.

La competitividad que posee un jugador lo puede transformar en un ejemplo para el plantel, un referente y sobre todo ganarse la confianza del entrenador, demostrando lo mucho que le interesa ganar colectivamente. Esa cualidad es algo que para Prigioni es muy importante, sobre todo para el día a día:“Pienso que cuando tenés un jugador que tiene ese nivel, de que le importe mucho el competir, el ganar, se hace mucho más fácil de manejar el carácter fuerte que tiene”.

Patrick Beverley festejó como nadie llegar a los playoffs, sabía que salir de Clippers donde los jugaban siempre fue algo difícil de digerir, pero ser parte importante del núcleo joven de los Wolves y llegar a los postemporada era una meta grande. Hacía allí se enfocó, lo consiguió y ahora no se achica, quiere más.