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La ex estrella de la NBA, Stephon Marbury, siempre ha criticado las zapatillas de otras marcas por ser 'caras'. Pero Marbury llevó sus críticas al otro extremo nivel en 2015, cuando acusó a Michael Jordan de “robar” a la gente e inició una guerra imposible de ganar ante la exitosa marca.

Marbury llevó sus quejas a las redes sociales para dar a entender que no estaba feliz con lo poco accesible que eran las Air Jordan para la gente "de barrio", según explicaba. Jordan, que para todo es competitivo, nunca dijo nada con palabras, pero inmediatamente sacó un nuevo modelo de las Air y publicó el éxito de sus ventas para contradecir a Marbury.

El enojo de Stephon tiene su sentido, de todas formas. El exjugador creció en la pobreza en un proyecto de vivienda en Nueva York. Marbury era uno de siete hijos y, cuando jugaba al básquet, contaba que un par de Air Jordans. Por supuesto, nunca pudo commprárselas de chico, y apenas pudo cumplir ese sueño cuando ya estaba en la secundaria. 

Marbury lanzó su propia línea llamada Starbury para presentar una alternativa a los costosos productos de las superestrellas de la NBA. Debutando mientras aún estaba en la liga, apenas costaban 15 dólares y se vendió bien, considerando su competencia en el mercado. Sin embargo, Starbury desapareció cuando se declaró en bancarrota en 2009. También fue ese año cuando Marbury jugó por última vez en la NBA.

La guerra de Stephon Marbury en 2015 contra los zapatos Jordan estaba relacionada con el plan para relanzar su línea de calzado Starbury. Starbury se volvió a lanzar en 2016 y actualmente está de vuelta en el mercado, aunque no está recibiendo el tipo de atención que recibió cuando Mabury todavía estaba en la NBA.