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A pesar de que los New York Knicks tienen solamente dos anillos de la NBA, el Madison Square Garden, estadio en el cual hacen de local, es uno de los más importantes de todo el mundo y es considerado por muchos, la meca del básquet. Más de un jugador ha declarado su fanatismo por éste y su alegría por jugar tan solo un partido, pero también hubo otros que se destacaron y marcaron historia.

Mucho antes de ser considerado una superestrella y ganar sus anillos, Stehphen Curry tuvo una noche brillante en 2013, cuando los Warriors derrotaron a los Knicks por 109 a 103. El base anotó nada menos que 54 puntos con un 11 de 13 en triples, a lo que le agregó 7 asistencias, 6 rebotes y 3 robos. Esto fue una demostración de lo que se venía, aunque pocos lo vieron.

En la mayoría de los records de la NBA hay un nombre que aparece. Michael Jordan. El 25 de marzo de 1995, el entonces jugador de los Bulls convirtió 55 tantos (21/37 TC, 3/4 T3, 10/11 TL) y su equipo derrotó a los locales por 113 a 111. El propio Jordan ha declarado más de una vez que fue el estadio en el que más le gustaba jugar.

Nos vamos aún más atrás en el tiempo para hablar por primera vez de un jugador de los Knicks. 16 de febrero de 1986. Bernard King. 55 puntos con un 19/33 TC, 11 rebotes, 3 asistencias y 1 robo. Derrota en el clásico contra los Nets por 126-117. El mismo jugador había anotado 60 en el día de navidad de 1984 contra el mismo equipo, convirtiendo 22 tiros libres.

23 de enero de 2019, la fecha más cercana de la lista. James Harden y sus Houston Rockets le ganaron a New York 114-110 y la barba tuvo un rendimiento espectacular con 61 puntos, 15 rebotes, 4 asistencias y 5 robos. Este jugador hizo que no sorprenda estadísticas de este tipo.

Parecido a lo que pasa con Jordan, Kobe Bryant es figura repetidas en estos repasos. En 2009, Black Mamba aplastó él mismo a los neoyorquinos anotando 61 con un perfecto 20 de 20 desde la línea de libres. Para suerte de Kobe, los Lakers se llevaron el triunfo 126-117.

Por último y para cerrar nos quedamos con Carmelo Anthony. En su paso por los Knicks, la franquicia volvió a tener expectativas de pelear por el título y Melo es una persona muy querida por los fanáticos. El 24 de enero de 2014 se convirtió en el jugador con más puntos anotados en el Madison Square Garden, tras haber finalizo el partido contra los Bobcats con 62 puntos. Además, los hizo con un 65% de efectividad (23/35) y sumándole 13 rebotes.