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Plateado exquisito, dorado elegante, dependiendo de la luz, puntos en detalle como si fueran granos de arena, líneas pronunciadas. De un lado una frase que esboza EUROPOS KREPŠINIO ČEMPIONATAS. Del otro una imagen pequeña de Vytis, el símbolo del emblema estatal de la República de Lituania, y unas palabras en mayúsculas que denotan fuerza y orgullo: LIETUVA y 1 LITAS. 

Lujosa, suntuosa, atractiva, con clase. Fue emitida en el 2011 y es una moneda perteneciente a Lituania, uno de los países en los que el básquet es una religión y las pelotas verdaderas letanías que soportan el disfrute y la esperanza de miles y miles de chicos, adultos y ancianos, día tras día, semana a semana, año a año.

La razón de su emisión no fue al azar y se lanzó desde el estado en conmemoración del EuroBasket 2011 que tuvo lugar en Lituania. El diseño gráfico de la moneda fue producido por Liudas Parulskis, a la vez que su modelo en yeso estuvo a cargo de Giedrius Paulauskis. 

Las monedas, que también tuvieron una edición de 50 litas, se crearon en la UAB Lietuvos monetų kalykla (Casa de la Moneda de Lituania) y están hechas de una aleación de cobre y níquel. Fueron lanzadas un millón de piezas en junio de ese año anteriormente mencionado y quedaron para siempre en la historia por sus particularidades.

En el EuroBasket, lamentablemente, Lituania no pudo mostrar su mejor versión y cayó en cuartos de final ante Macedonia en un partido completamente peleado (67-65), un 14 de septiembre en la cancha del poderoso Zalgiris, estadio en el que se celebraron todas las instancias decisivas. Por fortuna los locales pudieron batallar y terminaron quedándose con el quinto puesto del certamen tras derrotar a Grecia 73-69. 

Rimantas Kaukenas, Mantas Kalnietis, Tomas Delininkaitis, Martynas Pocius, Paulius Jankunas, Darius Songaila, Simas Jasaitis, Jonas Valanciunas, Ksistof Lavrinovic, Sarunas Jasikevicius, Marijonas Petraviciusy Robertas Javtokas fueron los integrantes de aquel plantel lituano que quedó resignado a un puesto secundario por no conseguir los objetivos y por el brillo de una moneda que se robó todas las miradas.

De hecho, un año después el objeto ganó el premio a la moneda de circulación más hermosa en la Conferencia de Directores de la Casa de la Moneda, que se lleva a cabo cada dos años. 

Durante la edición XXVII, que tuvo lugar en Viena, Austria, se evaluaron las producidas en 2011 y 2012. Compitieron por la nominación de la moneda más bella y la más avanzada tecnológicamente en las categorías de moneda de oro conmemorativa, otra moneda conmemorativa y moneda de circulación. La lituana recibió el premio por una expresión perfecta del tema, la simplicidad y claridad de la expresión visual.

"Las monedas conmemorativas del Banco de Lituania con frecuencia se convierten en ganadoras de varios concursos internacionales, sin embargo, se otorgó una moneda en circulación por primera vez", dijo Audrius Misevicius, miembro de la junta directiva del Banco de Lituania presidente de Diseño y Producción de Monedas, en una entrevista con The Baltic Times.

A su vez, Saulius Vaitiekunas, director de la Casa de la Moneda de Lituania, que recibió el galardón, dijo que era obvio desde el principio que el objeto se destacaba entre otros aspirantes a esta nominación: "Es difícil decir cuántos fanáticos del deporte expresaron su simpatía por la moneda dedicada al básquet durante la votación secreta, pero es obvio que la mismo, como resultado del trabajo en equipo de los artistas, el Banco de Lituania y la Casa de la Moneda, merecía el premio más alto de la comunidad mundial de mineros".

Una moneda que supo ser mucho más que eso. Una medalla, el trabajo de una pasión. Diseñada con el corazón, nada tuvo que ver la razón. Como en la cancha, al igual que en el básquet, donde gobierna la emoción. 

Ignacio Miranda/ [email protected]
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