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En un partido en el que el Gran Canaria se jugaba consolidar su sexta posición en la Liga ACB, consiguió una importante victoria contra el Fuenlabrada con un marcador final de 97-81. A pesar de la ausencia de Ferran Bassas y John Shurna, el equipo demostró su intención de ganar y no relajarse ante un rival ya descendido. Tras un primer cuarto ajustado, el Gran Canaria se mostró más sólido en el segundo y tercer periodo, liderados por la intimidación de Khalifa Diop y el acierto exterior de Nicolás Brussino. Con un gran trabajo en equipo y una segunda unidad también efectiva, el Gran Canaria rompió su mala racha fuera de casa y prácticamente aseguró su posición en los playoffs.

El equipo de Jaka Lakovic se apoyó en el poderío de Diop en la zona y la dirección de Kljajic, junto con los fundamentos de Inglis y Slaughter, para entonarse en un partido que se jugó en un pabellón desangelado. A pesar del intento del Carplus Fuenlabrada de dar una alegría a sus seguidores, el Gran Canaria elevó la intensidad defensiva para castigar a su rival y asegurarse la victoria. La conexión entre Brussino y Benite, sumada a la potencia de Carrera y Diop, permitió al Gran Canaria ampliar la renta en el marcador y llevarse una merecida victoria por 81-97.

La cuenta de los argentinos fue favorable. Nico Brussino anotó 7 puntos, bajó 4 rebotes y dió 2 asistencias, mientras que Juan Fernández sumo 11 tantos, con 3 recobros, una pasé final y un robo.